La violencia contra los líderes sociales e indígenas en el país no para. El pasado fin de semana, hombres armados asesinaron al líder indígena y artesano identificado como Yesid Caña, en un hecho ocurrido en La Guada, en Caldono (Cauca).

Caña era nativo de la vereda El Rincón, de este municipio. De acuerdo con el reporte ofrecido a medios locales por Paulo Porra, secretario de Gobierno municipal de Caldono, Caña fue atacado por hombres armados entre los sectores de El Rincón y San Antonio, en límites de los resguardos de La Aguada y Caldono.

El cuerpo de la víctima fue trasladado a medicina legal en Santander de Quilichao. Autoridades policiales iniciaron la investigación correspondiente para dar con los responsables de este asesinato.

Feliciano Valencia, exconsejero del Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric), lamentó este suceso y denunció a través de su cuenta Twitter la “aterradora ola de violencia en las últimas horas en el Cauca”. Además, el activista alertó que aparte del homicidio contra Yesid Caña, durante el fin de semana en esta región del país se cometió una masacre, el asesinato del comerciante Mauricio Capote y el asesinato del guardia indígena Luis Tombé, además de la detonación de un carro bomba en Argelia.

Según Indepaz, con la de este fin de semana ya son seis las masacres perpetradas en el departamento del Cauca, en lo corrido de 2022, mientras en el país asciende a 37.

El líder indígena asesinado Yesid Caña era conocido en Cauca por su talento como artesano. Su trabajo trascendió en el país al elaborar la mochila más grande de América con la que pretendía romper un Récord Guinness en la modalidad Gigante.

La inusual mochila fue hecha con vellones de lana de ovejo, mide tres metros de alto, tiene 1.60 metros de diámetro, su tunda o cargadera es de ocho metros y pesa alrededor de tres arrobas.

Caña empezó a tejer la mochila en 2011 y demoró 10 años terminarla. De acuerdo con voceros del Consejo Regional Indígena del Cauca (Cric), este trabajo fue presentado por Cañas en el aniversario número 50 de esta institución.

La Defensoría del Pueblo de Colombia denunció el pasado martes 26 de abril que durante el primer trimestre de este año han sido asesinados 52 líderes sociales y defensores de derechos humanos en el país.

Hasta esa fecha, los departamentos más afectados son Cauca, con ocho asesinatos; seguido de Putumayo, con siete; mientras que Nariño, Norte de Santander y Arauca han registrado cuatro crímenes de este tipo.

“Los homicidios de líderes sociales y personas defensoras de Derechos Humanos constituyen una grave afectación a las bases de la democracia porque son ellos quienes consagran sus vidas para defender los derechos de sus comunidades. Por eso el estado no puede bajar la guardia para protegerlos y brindarles las herramientas que faciliten su admirable labor”, subrayó el defensor del pueblo, Carlos Camargo al presentar los datos.

El comunicado detalló que en enero se registraron 13 homicidios, en febrero la cifra fue de 18 casos y en marzo, 21 asesinatos adicionales.

En este sentido, el defensor del pueblo destacó que el organismo hará seguimiento a hechos como secuestros, que al finalizar el primer trimestre había registradas un total de 45 víctimas de este delito, y a los desplazamientos forzados, que en el mismo periodo alcanzaron los 43 casos.

“Desde la Defensoría del Pueblo evidenciamos la necesidad de crear este Observatorio de Derechos Humanos, que nos permite hacer un seguimiento permanente a las principales conductas vulneradoras de los Derechos Humanos y el Derecho Humanitario en el país”, agregado Camargo.