El pasado 2 de noviembre, los líderes del Comité Latino-Judío del Congreso de Estados Unidos rechazaron conjuntamente la decisión de Colombia, Chile y Bolivia de romper lazos diplomáticos con Israel. A pesar de ser una denuncia por los actos de los tres países latinoamericanos, los parlamentarios se centraron en las declaraciones del presidente Gustavo Petro.

El grupo de congresistas está conformado por Debbie Wasserman Schultz, Mario Díaz-Balart, Adriano Espaillat y Tony Gonzales. A ellos se unió Henry Cuellar, copresidente del Comité a favor de Colombia de la Cámara de Representantes, para emitir una declaración conjunta sobre lo ocurrido.

En primer lugar, se manifestaron en contra del retiro de embajadores por parte de Colombia, Chile y Bolivia.

“Estamos consternados por la decisión de los gobiernos de Chile y Colombia de retirar a sus embajadores de Israel y la suspensión unilateral de las relaciones diplomáticas de Bolivia con Israel. Estamos de acuerdo con la evaluación del gobierno israelí de que estas decisiones representan ‘una rendición al terrorismo y al régimen de los Ayatolás en Irán’”, se lee en la declaración.

Además, recalcaron que el Congreso de Estados Unidos y el pueblo americano apoyan el derecho de Israel a defenderse de los ataques de Hamás: “Al igual que la abrumadora mayoría de los judíos latinoamericanos, quienes han condenado el uso de retórica antisemita e incitación a la violencia por parte del presidente colombiano Petro, el presidente chileno Boric y el presidente boliviano Arce. Nos solidarizamos con estas comunidades que han sido ignoradas por sus líderes”.

El presidente Gustavo Petro ha tomado la decisión de llamar a consultas a la embajadora colombiana en Tel Aviv, Margarita Manjarrez. | Foto: foto1: Getty Images, foto 2: Presidencia

El grupo cuenta que se reunió con Luis Gilberto Murillo, embajador de Colombia en Estados Unidos, para expresar su “desprecio” por las declaraciones del presidente colombiano. Además, dicen que el comportamiento “destructivo” es “inaceptable” para un aliado de su talla.

“Después de reunirnos con el embajador de Colombia en Estados Unidos la semana pasada y expresar nuestro desprecio por la continua corriente de declaraciones antisemitas y difamatorias del presidente Petro, como acusar a Israel de genocidio y comparar a los judíos colombianos con los nazis, advertimos que este comportamiento destructivo era inaceptable por parte de un aliado estratégico no miembro de la OTAN de Estados Unidos”, dice el comunicado.

De esa forma, como líderes que han buscado mejorar las relaciones entre América Latina e Israel, concluyen que “este evidente desprecio por Israel y el pueblo judío es un retroceso profundamente decepcionante que nos esforzaremos por revertir”.

Desde la publicación de la declaración conjunta, el tono del presidente Gustavo Petro contra Israel sigue siendo el mismo. Este jueves, el mandatario dio a conocer que Colombia apoyará una denuncia que se radicó en la Corte Penal Internacional (CPI) en contra del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu.

Presidente Petro y Benjamín Netanyahu primer ministro israelí | Foto: Foto Presidencia y foto Reuters

Según Petro, Netanyahu estaría incurriendo en crímenes de guerra por la ola de violencia que se ha registrado en Gaza, en el estallido de guerra en Oriente Medio.

“La República de Colombia va a coadyuvar la denuncia de la República de Argelia interpuesta ante la Corte Penal Internacional por crímenes de guerra contra el señor Benjamín Netanyahu ante la masacre de niños y civiles del pueblo palestino que ha producido”, manifestó Petro.

Y agregó: “El canciller de Colombia se reunirá mañana con el fiscal de la Corte Penal Internacional”.