El Congreso de la República está a punto de conciliar un proyecto de ley que le da facultades especiales al jefe de Estado para reintegrar al servicio activo a generales de la Policía que estén retirados de la institución.
Ese articulado que podría convertirse en norma justo cuando el país pasa por el escándalo de las posibles infiltraciones de las disidencias de las Farc a la institución, que habrían sido protagonizadas por un general que el presidente Gustavo Petro regresó al servicio.
Se trata del proyecto por medio del cual se establecen disposiciones relativas a la reincorporación de oficiales y miembros del nivel ejecutivo al servicio activo en la Policía Nacional, con el que se pretende modificar un artículo de la Ley 1791 del 2000.
El texto establece en uno de sus artículos que el Gobierno de turno tendría facultades discrecionales para determinar quiénes serán los uniformados que se reintegren al servicio. Además, determina que este podrá escoger libremente entre los brigadieres generales y los mayores generales que serán beneficiados con esa medida.
“El personal de oficiales y del nivel ejecutivo retirado a solicitud propia o por llamamiento a calificar servicios podrá ser reincorporado en cualquier tiempo, a petición de parte o por voluntad del Gobierno Nacional o de la Dirección General de la Policía Nacional, según el caso, previo concepto favorable de la Junta Asesora del Ministerio de Defensa para la Policía Nacional para oficiales o de la Junta de Clasificación y Evaluación para el nivel ejecutivo”, se detalla en el articulado.
El proyecto de ley pasó desapercibido en los cuatro debates en el Congreso, con respaldos de bancadas del Gobierno y de oposición, y está a punto de convertirse en ley, pues solo falta que la conciliación sea votada por las dos cámaras.
“Este proyecto le otorga facultades al presidente que, si bien es cierto que en este momento de inseguridad del país se necesitan más policías, el asunto está en que el presidente podría reintegrar oficiales que han sido destituidos o que se han retirado de manera libre, sin ningún tipo de requisito. Nos preocupa que el presidente de la República de turno, sea quien sea, quede con esas facultades libres, arbitrarias y sin ninguna distinción”, enfatizó el senador Manuel Virgüez.
El congresista señaló que el Partido Mira envió cartas a las presidencias del Senado y la Cámara de Representantes para pedir que esa conciliación no se vote, con el objetivo de que vuelva a tramitarse un articulado que persiga ese objetivo, pero sin darle facultades especiales al presidente de turno. “Es un asunto de seguridad nacional, porque el presidente podría saltarse la revisión de la junta asesora de generales”, concluyó el senador Virgüez.