Se registró lo que sería un primer roce entre el equipo de empalme del gobierno del presidente Duque y el comité del mandatario electo Gustavo Petro. La molestia desde la orilla del Pacto Histórico estaría relacionada con el proceso de contratación.

En primera instancia, Mauricio Lizcano, uno de los coordinadores del equipo de empalme del presidente electo Gustavo Peto, alertó que no hay “recato” en la contratación del gobierno Duque.

Lizcano manifestó que no es bien visto que se suscriban contratos faltando 15 días para que se acabe la administración Duque.

Sobre esas pullas, el equipo de empalme del presidente Duque realizó una férrea defensa al proceso de contratación. En ese sentido, uno de los coordinadores de la transición, Víctor Muñoz, fue enfático en señalar que no existe improvisación en la contratación del Gobierno, advirtiendo que existen casos en los que desde hace 1 año se está adelantando el trámite.

“Con Mauricio Lizcano hemos tenido una conversación amplia, clara, frente a todo el procedimiento de empalme. Ahí es muy importante mencionar que eso que se hace referencia a líneas rojas corresponden al proceso del canal del Dique que surtió todo el proceso de consultas previas y la estructuración técnica”, sostuvo Muñoz.

Y agregó: “Están otros temas asociados a la concesión del Runt, concesión que fue adjudicada hace varios meses; otros temas asociados al Ministerio de las TIC, donde precisamente se menciona que las zonas donde se podrían ver afectadas en caso de no avanzar la contratación, son zonas como: Amazonas, Guainía, Vaupés y Vichada”.

“Hay unos procesos de tiempo atrás que están surtiendo sus trámites, que han surtido sus debates y que obedecen a una estructuración técnica; también hay una serie de procesos que están por iniciar por parte del gobierno, para que sean iniciados en el gobierno entrante”, explicó Muñoz.

El director del Departamento Administrativo de la Presidencia, Víctor Muñoz, reveló que las sesiones de empalme se han desarrollado con respeto y transparencia, entregando información sobre la gestión de la administración Duque.

¿Por qué gobierno de Petro cambió de decisión y anunció que estos dos nuevos impuestos ya no van?

Varios funcionarios designados por el presidente electo Gustavo Petro anunciaron la semana pasada cómo se financiarían varios de sus programas y revelaron posibles nuevos impuestos para lograr implementarlos.

Carolina Corcho, próxima ministra de Salud, planteó en el retiro programático del Pacto Histórico colocar un tributo a las bebidas azucaradas, mientras que la futura ministra de Cultura, Patricia Ariza, habló de aumentar la base gravable de la telefonía móvil.

Carolina Corcho, ministra de Salud designada.

“Los impuestos a las bebidas azucaradas, además de tener impactos favorables en la salud pública porque desincentivan el consumo de gaseosas y reducen las enfermedades crónicas no transmisibles, podrían ser una opción de recaudo para el sistema de salud colombiano”, dijo Corcho en aquel momento.

De la misma manera, el nuevo director de la Dian, Luis Carlos Reyes, rompió el silencio con respecto a estos anuncios y manifestó este lunes que estos dos impuestos no irán en la administración de Petro, por el momento.

Luis Carlos Reyes, director designado de la Dian. | Foto: .

El economista, de igual manera, aprovechó el momento para explicar que estos dos tributos no se implementarán debido a que tocan el bolsillo de miles de colombianos, principalmente de la clase media.

“La medida de los celulares era una sugerencia que se estaba discutiendo porque se pensaba que era mucho más privado. Realmente es una medida que no se está contemplando. Lo más importante es que no se toquen las finanzas del colombiano de a pie”, aseguró inicialmente.

Luego, Reyes agregó: “Esto podría impactar en el usurario más pobre y va dificultar a que millones de colombianos que hoy están desconectados accedan a tecnologías, por eso no van”.

El nuevo jefe de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales reiteró finalmente que el objetivo del próximo gobierno es afectar lo menos posible la economía de la ciudadanía trabajadora.

“Vamos a discutir las posibilidades que están sobre la mesa, siempre teniendo en cuenta que a la persona de la clase trabajadora no deba cobrársele un peso más en impuestos”, anotó.