Ante la difícil situación que están viviendo los líderes sociales en el departamento del Cauca, el presidente de la República, Gustavo Petro, viajó este miércoles a esa región del país para adelantar un encuentro en “defensa de la vida”.

El mandatario colombiano llegó en compañía del ministro del Interior, Alfonso Prada, para anunciar medidas especiales de protección para los representantes de derechos humanos y líderes sociales que pueden verse amenazados en su integridad.

Sin embargo, llamó la atención de los asistentes la ausencia de la vicepresidenta Francia Márquez, pues ella es nacida en este departamento, en el municipio de Suárez.

Ante la inquietud de los asistentes, el presidente Petro salió a aclarar que la no presencia de la vicepresidenta se debe a un inconveniente de tipo normativo.

”Francia no está aquí porque hay un decreto estúpido, o no tan estúpido, que dice que el presidente y la vicepresidenta no pueden estar en el mismo sitio, porque los pueden matar a ambos, entonces es dar un papayazo”, explicó el jefe de Estado.

El mandatario reconoció que este es un “riesgo real”, pero a renglón seguido lanzó una afirmación que de inmediato desató controversia y revivió los rumores que han venido generándose sobre un posible distanciamiento entre Petro y Márquez.

”Si ella no está con nosotros, puede quedar muy marginada, entonces se va evaporando su liderazgo y eso no fue lo que prometimos en la campaña”, puntualizó el jefe de Estado. Y luego lanzó una dura sentencia: “los riesgos tendremos que asumirlos”.

Más allá de esta controversial declaración, durante su visita al Cauca Petro se encontró con un panorama desolador.

De acuerdo con el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz), en lo corrido de este año han sido asesinados 137 líderes sociales, y desde la firma del acuerdo de paz entre el Gobierno y las Farc, la cifra asciende a 1.364.

Hace varios días, en Santander de Quilichao, Cauca, un hombre reconocido por su labor a favor de los derechos humanos y su escolta fueron asesinados.

El caso obedece al líder social Edinson Murillo Arata, quien era miembro del Consejo Comunitario Zanjón de Garrapatero, y de Yeinfer Medina, el hombre que le brindaba protección. Sujetos armados los interceptaron y les dispararon con arma de fuego en repetidas ocasiones hasta causarles la muerte, cuando se movilizaban en moto por la vereda Tamiango de Santander de Quilichao.

Indepaz ha recordado varias veces que en el norte del Cauca hay presencia de las disidencias Dagoberto Ramos y Jaime Martínez de las Farc y del Ejército de Liberación Nacional (ELN).

”La Defensoría del Pueblo ha emitido las Alertas 048/19 y 019/22 para el municipio de Santander de Quilichao en las cuales señala que las amenazas y atentados son una muestra de la intención de acallar las exigencias colectivas que representan líderes y lideresas de organizaciones campesinas, indígenas, afrodescendientes y firmantes en proceso de reincorporación”, añadió el instituto.

Durante su visita a esa región del país, Petro hizo un recorrido por los municipios de Caldono y Santander de Quilichao, zonas históricamente golpeadas por una profunda ola de violencia.

Además, sostuvo reuniones con integrantes de la minga indígena del departamento del Cauca y los consejos comunitarios de esa región del país, para escuchar de primera mano las preocupaciones en materia de seguridad y desarrollo.