En la era digital, los teléfonos celulares se han convertido en un elemento vital para las personas, por lo que el cargador es su indispensable para el suministro de energía. Sin embargo, este componente crucial puede convertirse en una amenaza si no se maneja adecuadamente.
Los informes de cargadores de teléfonos celulares que explotan han sido motivo de preocupación, lo que plantea la pregunta: ¿cómo es posible garantizar que el cargador sea seguro y evitar riesgos potenciales?
Prácticas para prevenir explosiones de cargadores
Afortunadamente, existen medidas que los usuarios pueden tomar para reducir significativamente el riesgo de que su cargador de teléfono celular explote. Aquí hay algunas mejores prácticas recomendadas:
- Utilice cargadores originales y certificados: siempre es mejor utilizar el cargador original proporcionado por el fabricante del teléfono celular. Estos cargadores han sido sometidos a rigurosas pruebas de seguridad y están diseñados para funcionar de manera segura con su dispositivo. Si necesita un reemplazo, asegúrese de adquirir uno certificado por el fabricante.
- Evitar cargar el teléfono mientras está en uso: cargar el teléfono celular mientras está en uso puede generar calor adicional y aumentar el riesgo de sobrecalentamiento. Para evitar esto, es recomendable cargar el dispositivo cuando no se esté utilizando, preferiblemente durante la noche o cuando no necesite usarlo activamente.
- Inspeccionar regularmente el cargador y su cable: revisar periódicamente el estado del cargador y su cable para detectar signos de desgaste o daño. Si nota algún cable pelado, un enchufe suelto o cualquier otro problema, debe reemplazar el cargador de inmediato para evitar riesgos potenciales.
- No cubrir el teléfono mientras se esté cargando: evitar cubrir el teléfono mientras se está cargando, ya que esto puede atrapar el calor y aumentar el riesgo de sobrecalentamiento. Dejar suficiente espacio alrededor del dispositivo para permitir una ventilación adecuada.
- Mantener el área de carga libre de obstrucciones: asegurarse de que el área donde carga su teléfono celular esté libre de obstrucciones y materiales inflamables. Evitar cargar el teléfono en la cama o en superficies blandas que puedan bloquear la circulación de aire y aumentar el riesgo de incendio.
- Desenchufar el cargador cuando no esté en uso: cuando no esté utilizando el cargador, hay que asegurarse de desenchufarlo para evitar el consumo de energía innecesario y reducir el riesgo de sobrecalentamiento.
*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de SEMANA.