Un ataque al corazón puede resultar en un infarto fulminante, y de ahí la importancia de tener en cuenta los síntomas de alerta que se desatan justo en el momento en que se está teniendo uno.

Según la Biblioteca de Medicina de Estados Unidos, en su portal Medline Plus, nada más en ese país casi 800.000 personas sufren ataques al corazón anualmente, lo que puede resultar en la muerte de la persona si no se tienen los cuidados necesarios urgentemente, por lo que se hace un llamado a la población para que asista a un centro médico inmediatamente o llame a una ambulancia en caso de presentar síntomas.

“Un ataque al corazón ocurre cuando el flujo de sangre al corazón se bloquea repentinamente. Sin la sangre que entra, el corazón no puede obtener oxígeno. Si no se trata rápidamente, el músculo cardíaco comienza a morir”, explicó el portal citado sobre la forma en como se produce el diagnóstico.

Así entonces, el ataque al corazón o cardíaco puede ser provocado por una obstrucción de grasa u otras sustancias que puedan taponar una artería coronaria, lo que limitaría el paso de sangre y oxígeno al corazón y provocaría el ataque, según recoge la organización estadounidense Mayo Clinic.

Y a reglón seguido agregó: “a veces, una placa puede romperse y formar un coágulo que bloquea el flujo de sangre. La interrupción del flujo de sangre puede dañar o destruir una parte del músculo cardíaco”, afirmando otra de las formas en como se puede producir el ataque.

Entre tanto, otra de las causas por las que puede ocurrir, sin embargo, tiende a ser la menos común, según explicó Medline Plus, y esta es luego de sufrir un espasmo severo en una arteria coronaria, lo cual también cortaría el flujo de sangre y produciría el ataque.

El dolor del corazón comienza de manera suave como una molestia que va empeorando con el tiempo y que empieza a arder. Si el dolor es en puntadas y dura uno o dos segundos, puede estar relacionado con situaciones que provocaron ansiedad, estrés o depresión en el paciente.

Síntomas

Cuando el dolor aumenta y la persona que lo siente se toca el pecho o se hace pequeños movimientos sobre la zona, es probable que el dolor sea muscular y no esté relacionado con un infarto. Por eso, el doctor Juan Veller, médico con especialidad en Cardiología, resalta que “ante la duda es mejor consultar”.

El especialista explicó que en algunas ocasiones el dolor que indica un infarto no ocurre en el tórax, sino en el cuello, o en la parte de abajo de la mandíbula, o incluso en la parte interna de los brazos, principalmente en el izquierdo.

La falta de aire también puede ser un síntoma de un infarto. Cuando un paciente presenta factores de riesgo y presenta este síntoma, es probable que se trate de un ataque cardíaco.

En algunas personas se pueden presentar algunos síntomas raros o inusuales como palidez repentina; también se puede poner frío en la parte de los pies y las manos, puede presentar una sudoración excesiva e incómoda y se pueden presentar náuseas y vómitos.

El doctor Juan Veller explica que cuando sucede un infarto se produce la muerte de algunas células que están presentes en el corazón.

El especialista menciona que este órgano es como una bomba muscular que late aproximadamente unas 4.200 veces por minuto. Para poder latir de forma correcta, el corazón necesita una cantidad considerable de oxígeno y nutrientes que llegan al órgano por medio de las arterias.