La presión arterial elevada es una enfermedad en la que la fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de las arterias es muy elevada.

Según explica Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, está determinada por dos números. La presión sistólica, que mide la presión en las arterias cuando el corazón late, y la presión diastólica, mide la presión en las arterias entre los latidos.

Los rangos de la presión arterial son:

  • Una presión arterial normal es cuando la presión arterial es menor a 120/80 mm Hg, la mayoría de las veces.
  • Una presión arterial alta (hipertensión) es cuando uno o ambos números de la presión arterial son mayores de 130/80 mm Hg, la mayoría de las veces.
  • Si el valor del número superior de su presión arterial es entre 120 y 130 mm Hg y el valor del número inferior es menor a 80 mm Hg, se denomina presión arterial elevada.

Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, señala algunos del los factores que incrementan el riesgo de padecer hipertensión:

  • Ser afroamericano.
  • Estar estresado o con mucha ansiedad frecuentemente.
  • Consumo excesivo de alcohol.
  • Consumo excesivo de sal.
  • Historial familiar con hipertensión.
  • Tener diabetes.
  • Fumar.

Es importante realizar exámenes médicos regularmente para verificar que la presión arterial no esté elevada, pues puede poner en riesgo la salud de las personas. “Usted puede tener la presión arterial alta, o hipertensión, y aun así sentirse bien. Eso es debido a que la presión arterial alta a menudo no causa señales de enfermedad que una persona pueda ver o sentir. Pero la presión arterial alta, a veces llamada “el asesino silencioso”, indican los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés).

La hipertensión puede causar graves afectaciones. “Entre otras complicaciones, la hipertensión puede producir daños cardiacos graves. El exceso de presión puede endurecer las arterias, con lo que se reducirá el flujo de sangre y oxígeno que llega al corazón”, detalla la Organización Mundial de la Salud.

De acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, la hipertensión puede causar daños en el cerebro y otras afectaciones. “La presión arterial alta (hipertensión) puede dañar de manera discreta el organismo durante años antes de que se manifiesten los síntomas. La hipertensión arterial no controlada puede generar discapacidad, una mala calidad de vida o incluso un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular letal”.

En primer lugar, la presión arterial alta puede causar el estrechamiento o bloqueo de las arterias, limitando el flujo sanguíneo al cerebro. Esto puede provocar demencia vascular, al igual que puede ser uno de los daños resultado de un accidente cerebrovascular.

En segundo lugar, la hipertensión también puede causar un deterioro cognitivo leve. “Esta afección es una etapa de transición entre los cambios en la comprensión y la memoria que generalmente se producen con el envejecimiento y los problemas más graves causados por la demencia”, explica Mayo Clinic.

¿Cómo prevenir la hipertensión?

Medline Plus destaca la importancia de llevar un estilo de vida saludable que ayude a prevenir y a controlar la presión arterial:

  • Tener una alimentación que sea saludable para el corazón. Incluir alimentos naturalmente bajos en grasa, como granos integrales, frutas y verduras.
  • Mantener el cuerpo hidratado. Tomar abundante agua.
  • Realizar actividad física diaria. El ejercicio ayuda al desarrollo de muchas enfermedades, incluyendo la hipertensión.