Igual al 8.000

Los nueve magistrados de la sala penal de la Corte Suprema utilizarán un esquema excepcional para darles curso a las investigaciones de los congresistas que aparecieron en el computador de ‘Jorge 40’. Tradicionalmente, en cada caso, la Corte encarga a un solo magistrado para que analice la situación del procesado y sea el ponente de las conclusiones a las que llegue. La sala en pleno toma la decisión final por mayoría y quienes no están de acuerdo, salvan el voto. Ahora, los nueve magistrados estudiarán colectivamente los procesos que se presenten, coordinados por el presidente de la sala. Una vez que se pongan de acuerdo sobre el fallo, no se revelará cómo fue la votación, nadie salvará el voto y todos firmarán la providencia. Este método fue copiado de los juicios a los congresistas del proceso 8.000.