EL MERCANTILISMO Y EL DEPORTE
Los símbolos deportivos, nuevos fetiches de la sociedad.
"Sociología Política del Deporte", Jean-Marie Brohm, Fondo de Cultura Económica, 1982, 334 páginas
Es difícil encontrar un licenciado en Educación Física que, además, se preocupe por las ciencias del espíritu y admita las teorías de Freud, de Marx y de los filósofos contemporáneos, para lograr una síntesis entre el análisis del deporte como desfogue de energía y como actividad comprometida con la sociedad.
Jean-Marie Brohm observa la comercialización del deporte en la sociedad capitalista, no como una aberración, sino como una de las manifestaciones de la sociedad mercantil capitalista que crea la competencia para el beneficio y el beneficio de la competición. El espectáculo deportivo masificado y comercializado permite el pago de un salario para el deportista por encima del promedio; la bolsa de campeones, en la que danzan millones de dólares y beneficios adicionales para los empresarios, se adjunta a las campañas publicitarias para producir un ganador en donde no lo hay, o inflar un jugador mediano hasta la categoría de gran campeón .
La función mitológica del deporte está garantizada en las ceremonias con desfiles estruendosos y de gran comunicación de masas que aportan un eco mayor a la idea mitológica del deporte, con el griterío dosificado ante cualquier anotación; los símbolos deportivos pasan a ser otros nuevos fetiches de la sociedad mercantil, con venta de posters, afiches y calcomanias.
Existen otros ángulos desde los cuales se puede juzgar el deporte como la conformación de un modelo de superación y la traslación de energías psíquicas a los deportistas, con elementos que entran en la esfera del subconsciente.
Todos estos componentes ubican el deporte en una encrucijada, en la que se somete a los deportistas a un esfuerzo sobrehumano para lograr el éxito, a veces porque una nación y un gobierno requieren de una imagen diferente ante el mundo. -
Libardo González -