Recuperación económica tendrá más altibajos que los previstos

El inicio de 2021 ha estado marcado por la aceleración de los casos de covid-19 tanto a nivel global como en Colombia; por lo que cada vez es más claro que el país ha entrado en una segunda ola de contagios.

Como resultado, en las ciudades en las que hay una mayor presión sobre el sistema de salud se han adoptado nuevas restricciones, que incluyen toques de queda, aislamientos zonales y pico y cédula, entre otras.

Además, según Bancolombia, luego de haberse dinamizado hasta casi alcanzar niveles previos a la pandemia, la movilidad en la mayor parte del país se redujo desde antes de la Navidad hasta la primera semana de enero en cerca de siete puntos.

Esta es la caída más pronunciada ocurrida desde agosto, cuando se adoptaron restricciones de movilidad en varias localidades de Bogotá que también condujeron a menores desplazamientos.

Al detallar los datos de ventas a nivel de categorías y ciudad, las mayores afectaciones de los últimos días están en rubros que habían tenido un dinamismo importante en las jornadas de descuento de noviembre, tales como el vestuario y los artículos deportivos.

Asimismo, los gastos de entretenimiento volvieron a contraerse cerca del 50% anual, que es el registro promedio que ha mostrado esta categoría desde que terminó la cuarentena estricta.

Por otra parte, Ibagué es la ciudad en la que las compras se han afectado en una mayor proporción ya que cerró el 2020 con caídas del 26% producto de los recurrentes toques de queda. En Bogotá y Medellín los registros dan cuenta de un descenso de las ventas minoristas en la primera semana de enero de 18% y 16% anual, respectivamente.

Sobre la actividad productiva, las cifras revelan un deterioro de magnitud moderada. Es así como el índice NowCast Bancolombia marcó un descenso de 3,6% anual en los primeros días de diciembre (nivel más alto desde el inicio de la pandemia), que ha dado paso a un retroceso de 4,7% anual al cierre de la semana pasada.

Adicionalmente, Bancolombia prevé que esta desaceleración de casi un punto porcentual de la actividad puede continuar e incluso profundizarse durante la segunda quincena de enero. Así las cosas, estima que para finales de este mes el retroceso anual de la actividad podría rondar un 5,5%.

“Los resultados que hemos descrito tienen dos implicaciones importantes. La primera es que representan un indudable riesgo a la baja para el desempeño de nuestra economía en el corto plazo. Al respecto, vale la pena recordar que nuestros escenarios base y pesimista del PIB para el primer trimestre de 2021 son de -3,5% y - 7% respectivamente”, explica Bancolombia.

La segunda implicación es más esperanzadora, ya que el deterioro de la actividad y la demanda que se está presentando en la actualidad es mucho menos pronunciado que el reportado en la primera parte de la pandemia.

Por último, está el hecho de que las empresas se han adaptado a las acciones sanitarias y al trabajo remoto, por lo tanto la mayoría de las actividades productivas pueden seguirse realizando en estos momentos pese a que las medidas de control frente al virus se tornen más restrictivas.

“En suma, el arranque de 2021 pone de relieve los grandes desafíos que seguirá enfrentando la economía durante la coexistencia con la pandemia. En concreto, la aceleración de los casos, la respuesta de las autoridades y la reacción de los agentes económicos sugiere que la recuperación tendrá más altibajos de los que preveíamos hace algunos meses”, concluye Bancolombia.

Hay que recordar que en el cuarto trimestre de 2020, según Bancolombia, el PIB de Colombia habría caído un 4,3%, mientras que en el mismo trimestre de 2019 se había presentado un aumento del 3,3%.