LANZADOS A LA CALLE

12 de septiembre de 1994

LOS HOMELESS LOS estadounidenses que no tienen techo ni domicilio fijo, han aumentado en forma vertiginosa desde 1980. Un libro del sociólogo Christopher Jencks indica que de 35.000 personas que acudían noche a noche a los refugios comunitarios en 1980, se ha pasado a 170.000, y que de 86.000 que dormían en la calle o en los parques al comienzo de la década pasada, hoy 145.000 personas tienen el asfalto por cama. Lo impresionante del libro de Jencks, sin embargo, no son las causas del fenómeno, de las que se ha hablado suficientemente: desempleo, marginalidad, consumo de crack etc., etc. Lo que se revela es que muchos hospitales están negándose a recibir a los vagabundos enfermos mentales, y, lo que es peor, que el crecimiento del número de refugios ha llevado a que muchos 'buenos' ciudadanos no tengan inconveniente en echar a la calle a los miembros 'desajustados' de sus propias familias.