Estos son los 7 proyectos que se harían con la venta de activos

Es claro que el escándalo de Odebrecht le sigue pasando factura al sector de la infraestructura. De 30 proyectos contratados con el programa 4G, solo 15 cuentan a la fecha con cierre financiero definitivo. Un total de 5 concesiones tienen un avance de 0% y el panorama para lo que resta del año no es el mejor, teniendo en cuenta que no se han solucionado los problemas estructurales del sector; como licencias ambientales, predios y, sobretodo, financiamiento.

Aunque algunos concesionarios de 4G siguen haciendo esfuerzos de caja y capital para avanzar con las obras, solo 3 de los 15 que no tienen cierre cuentan con acuerdos avanzados de créditos puente. Este año se espera el cierre financiero de otros 7 proyectos y 6 más para 2020.

Lea también: Así intentan enderezar la Ruta del Sol

El panorama no es el mejor en 4G pero se pueden hacer más cosas con otros proyectos.

Así las cosas, algunos gremios -como la Cámara Colombiana de la Infraestructura (CCI) -están pidiendo señales positivas que permitan revitalizar todo el sector. Una de las señales sería - para este gremio- vender activos públicos - como Cenit o parte de Ecopetrol- para financiar proyectos que son importantes para el comercio exterior, pero que no tienen luz verde por falta de recursos.

Vale la pena aclarar que los recursos obtenidos con una eventual enajenación de activos públicos se destinarían a proyectos no contratados, pues la responsabilidad de los concesionarios 4G es conseguir el dinero para las obras por su cuenta y riesgo.

Según el presidente de la CCI, Juan Martín Caicedo, estos recursos podrían jalonar proyectos en veremos por cerca de $15 billones.

Entre las iniciativas planteadas por el gremio están: la doble calzada entre Y de Ciénaga y Barranquilla, proyecto que permitiría conectar en doble calzada la Ruta del Sol 3, que próximamente podría reactivar obras mediante un acuerdo con Impregilo, con la capital del Atlántico. Este trayecto tiene un costo estimado de $1,2 billones.

Le puede interesar: Cartagena supera a Cali en tráfico de pasajeros

Otra de las iniciativas que Caicedo presentó en un evento organizado por Anif, fue Villeta - Guaduas, tramo que hace parte de la Ruta del Sol 1, que no pudo ejecutarse por las dificultades técnicas y porque costaba más de lo previsto. Aunque se trata de un tramo de solo 17 kilómetros, las obras tendrían un costo de $2,2 billones.

Otra carretera que no se ha podido terminar es Buga - Buenaventura, donde se ha avanzado con algunos tramos, pero otros presentes desafíos que requieren de más dinero. Según la CCI, en este corredor de 44 kilómetros se requieren unos $1,95 billones.

Caicedo también habló de la necesidad de sacar adelante el tramo desde Santa Fe de Antioquia al portal de entrada del túnel del Toyo, más los equipos de ventilación e iluminación de este ducto. Esta obra y equipos tienen un costo aproximado de $1,2 billones.

Otro segmento de vía clave, que no ha sido contratado y que requiere el país, es el tramo entre Bogotá y El Tablón, en la vía que conduce de la capital de la República a Villavicencio. Los concesionarios Coviandes y Coviandina tienen dos tramos de esta carretera, pero no se ha contratado ese primer sector que necesita otros $2,37 billones. La vía ya no aguanta más peajes lo que dificulta una nueva Iniciativa Privada.

La CCI también planteó la construcción de 26 trayectos o carreteras y que no se han podido terminar por falta de recursos. Acá la inversión sería por $2,59 billones. Por último, se propone la construcción de la vía Pasto- Popayán, que estaba en la tercera ola de 4G pero nunca fue adjudicado. Se trata de una vía fundamental para el desarrollo del sur del país y de la conexión con Ecuador. Se requieren $3,4 billones.

Lea también: Estos son los 4 pecados capitales del túnel de la Línea

Según CCI, el Ministerio de Hacienda habría pedido un listado de proyectos y estos serían los que propone el gremio. La filosofía planteada es terminar los corredores clave del turismo y comercio exterior.

Estos proyectos se harían por obra pública y solo serían objeto de concesión una vez se ejecute la obra para la fase de operación. El Gobierno tendría la última palabra.

Pero antes de sacar adelante una 5G de vías es necesario poner la casa en orden para evitar que se repita la historia y evitar que en unos años se esté de nuevo buscando recursos del presupuesto o vía venta de activos.

“Se necesita avanzar en gestión contractual, una ley estatutaria de consulta previa, el fortalecimiento de la ANI, reglas claras y seguridad jurídica y completar los cierres financieros”, dijo Caicedo.