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ELECCIONES 2018

Umbral y cifra repartidora: dos temas claves para la supervivencia de los partidos

Estos dos conceptos, que no son tan sencillos de digerir, son claves para la supervivencia de los partidos políticos y de obligatorio entendimiento para los candidatos, pues de deben cumplir con sus requisitos para obtener una cargo de elección popular.

21 de febrero de 2018

La supervivencia de los partidos políticos depende de la cantidad de respaldo que reciban en las urnas, pero es cuestión de sus candidatos el salir a buscar y ganar el voto y, por supuesto, cumplir con los requisitos legales que la ley exige para que logren el cargo de elección popular al cual aspiran.

Dos de estos aspectos vitales para la supervivencia de las colectividades y de sus militantes son, precisamente, el umbral y la cifra repartidora. De hecho, partidos como Alianza Verde, el Polo y, entre otros, el Mira están muy atentos a su significado y desarrollo, pues de esto depende que se puedan permanecer en el Congreso. Incluso, el nuevo movimiento Farc podría lorgar curules adicionales a las 10 que por cuenta del proceso de paz ya tiene aseguradas.

SEMANA le explica a continuación qué significan cada uno de estos aspectos electorales.

Qué es el umbral

  • El umbral es el número de votos válidos que debe tener un partido o movimiento político para lograr una curul en el Congreso de la República. Esta cifra se calcula en cada elección, pues depende del número de votos válidos que en total se depositen durante cada jornada electoral.

  • El umbral se calcula de sumar todos los votos válidos de la jornada, incluidos los que se den por la casilla de voto en blanco. Luego se debe dividir por el número de cargos a entregar, en este caso por el de curules de Cámar y Senado (por aparte). Ese resultado, que se conoce como el cuociente electoral, se debe dividir nuevamente en 2 y el resultado es el umbral que se debe superar para llegar al Capitolio.

Qué es la cifra repartidora

  • Es la fórmula para garantizar la equitativa representación de los partidos, movimientos y grupos significativos de ciudadanos. Resulta de dividir sucesivamente por uno, dos, tres o más, el número de votos de cada lista en forma decreciente hasta que se obtenga un número igual al número de curules a proveer. El resultado menor se llamará cifra repartidora. Cada lista obtendrá tantas curules como veces esté contenida la cifra repartidora en el total de sus votos.