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Felicidad

Las 4 claves para despertarse de buen humor

Si usted es de quienes pelea con el despertador cada mañana o si definitivamente se considera que “se la lleva mejor con la noche”, esta información le conviene.

8 de enero de 2016

Dormir es una necesidad fisiológica que todo ser humano tiene. El tema es que cada persona tiene un ciclo circadiano distinto y hábitos o costumbres distintas que permiten modificar el sueño según su ritmo de vida. Este ciclo, en la teoría, se divide en 16 horas de vigilia y 8 de sueño, que es el tiempo necesario para que el cuerpo pueda tener su proceso de recuperación de energía y creación de nuevos recuerdos y fortalecimiento de habilidades mentales. ¿Cuántas horas debería dormir según su edad?

Pero cuando usted altera este ciclo por una u otra razón, puede verse afectado todo su desempeño y su estado de ánimo durante el día, teniendo consecuencias, a la vez, en el nivel de su productividad. Muchas veces las causas están bajo su control, mientras que otras puede que no tanto, como sucede con el jet-lag, o la desincronización que ocurre cuando usted viaja a países con un horario distinto y tiene que adaptarse a él.

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Aunque también están los casos en los que simplemente la pereza gana y “las cobijas se pegan”, por lo que levantarse y tener que madrugar puede resultar todo un martirio. Esto puede hacer que el día no empiece como realmente quisiera y, por el contrario, tenga una actitud que no le ayude a ser más productivo en su trabajo ni a estar dispuesto a soportar esos pequeños inconvenientes que pueden atravesarse durante su día.

  • Ciclos de sueño completos

Esto es lo básico. Como ya le dijimos, es de gran importancia que usted le dé a su cuerpo la importancia y el valor que merece, lo que implica descansar el tiempo necesario para que su cerebro complete sus funciones y su cuerpo pueda recargarse de energías. Así, esto dependería de un ciclo que esté entre las 6 y las 9 horas de sueño, lo cual usted mismo puede establecer y ‘tantear’, dependiendo de cómo se sienta descansado.

Muchas veces las personas se despiertan por sí solas luego de un tiempo de sueño, lo que puede ayudarle a estimar, efectivamente, de cuántas horas es su ciclo correspondiente para conocer mejor su cuerpo y empezar a tener prácticas más sanas.

  • Inicie con luz de sol

Incluso, si es artificial. Aunque las cortinas ayudan a eliminar el frío y el viento en las noches, cuando usted no tiene una barrera que le impida entrar al sol, la madrugada será mucho más tranquila y llevadera. Si le queda complicado dejar ingresar la luz, puede considerar unas lámparas que se venden hoy en día, imitando la intensidad y el color de la luz solar.

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  • Concéntrese en su respiración

No hay nada mejor que usted pueda hacer para empezar un día tranquilo que saber que todo está bajo su control. Cuando usted inicia con este “chip” encendido, su día será mucho más llevadero. Esto puede hacerlo con un ejercicio muy sencillo: manejar su respiración. El ser consciente durante unos minutos y saber cuánto tiempo retiene o por cuánto exhala el aire, le ayudará a su cuerpo a tranquilizarse y demostrar que usted puede manejar cualquier situación durante su día. Ahora, si sabe yoga y puede dedicarle unos minutos, será mucho mejor.

  • Penitencia

Esto es más a modo de truco para procurar mantener una sonrisa durante su mañana. Una vez abra los ojos en la mañana, póngase el reto de acordarse de un chiste o de un momento especial que lo haga mantener una sonrisa durante una hora. Cada vez que sienta que algo va mal o que su expresión se ha borrado, vuelva a pensar en ello. Considere esto con recuerdos y momentos agradables, que le ayuden a liberar dopamina desde su cerebro. Eso sí, procure uno nuevo cada día, para que “no pierda la gracia”.

  • El reloj biológico

Si le ha pasado que se despierta unos minutos antes de que suene su alarma o que hasta los fines de semana sigue madrugando, debe agradecérselo a su reloj biológico. Esto puede controlarse con un pequeño truco: todos los días levantarse a la misma hora, sin importar qué día sea. Quizás para fines de semana le resulte más difícil, pero es algo que le ayudará a controlar sus ciclos y le facilitará notablemente  la tarea de madrugar.