Emprenden cruzada para proteger ecosistemas claves del Caribe y la Orinoquia

Frenar la transformación de ecosistemas naturales y la pérdida de la biodiversidad es uno de los principales objetivos que persigue el proyecto denominado Detección Temprana de Cambios en Ecosistemas Claves del Caribe y la Orinoquía Colombiana. 

La iniciativa, promovida por el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), junto al Programa Riqueza Natural de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) y cinco Corporaciones Autónomas Regionales (CAR) del país, monitoreará los ecosistemas de bosques seco y húmedo tropical del Caribe, así como las sabanas inundables de la Orinoquia para identificar los cambios en las coberturas y promover su conservación y los beneficios ecosistémicos que de ellos se derivan.

Le sugerimos: Palmarito: la conservación con efecto dominó

Y es que estos dos ecosistemas que no están siendo monitoreados con el actual Sistema de Monitoreo de Bosques y Carbono (SMByC) del Ideam, de ahí su importancia. Además, porque este proyecto impactará el 9 por ciento del territorio nacional, al cual corresponden estas sabanas y bosques secos, de los cuales Colombia solo conserva un 8 por ciento. De estos últimos, 90 por ciento de sus coberturas han desaparecido debido a actividades como la agricultura y ganadería extensiva e intensiva, la minería y el urbanismo.  

_{Las sabanas de la Orinoquia, que están por debajo de los 500 metros de altitud, son ecosistemas que albergan cientos de especies de fauna y flora. Foto: Felipe Villegas/Instituto Humboldt.}

La iniciativa, que se ejecutará hasta diciembre de 2021, será reforzada por cinco CAR. Se trata de Corporinoquia, Corpocesar, Corpoguajira, Carsucre y Cardique. Su labor será de control y vigilancia en la transformación de los ecosistemas, permitiendo tomar acciones efectivas para disminuir la pérdida de la biodiversidad en sus territorios. 

Por esa razón, el proyecto le apunta al fortalecimiento de la gestión de las Corporaciones Autónomas Regionales, mediante el traspaso de metodologías y generación de boletines trimestrales con datos detallados del proceso de transformación de los ecosistemas clave.

Le puede interesar: Tras las huellas de la tortuga sabanera del Casanare

"Dicha información, esencial para frenar los cambios, orientará igualmente el apoyo en los recorridos de control y vigilancia en áreas donde se detectan las transformaciones. Estos boletines podrán ser consultados a través de las páginas web del Ideam y las cinco corporaciones vinculadas al proyecto", indicaron desde la Usaid. 

_{Colombia solo conserva el 8 por ciento de su bosque seco tropical: uno de los biomas más ricos en especies de flora y hábitat de un gran número de animales. Foto: Jhon Barros.} 

Yolanda González Hernández, directora del Ideam, señaló, a su turno, que era importante vincular activamente a las autoridades ambientales regionales en el proceso de generación y uso efectivo de información espacialmente explícita de los procesos de pérdida y transformación de ecosistemas claves, como los bosques secos y húmedos del Caribe y los ecosistemas de las llanuras aluviales orinocenses. 

De esta manera, las cinco corporaciones consolidarán sus capacidades técnicas en el monitoreo de dichos entornos, en el marco del Sistema de Monitoreo de Bosques y Carbono (SMByC), siendo esta una iniciativa del Ideam para el trabajo articulado con las regiones.

Le recomendamos: El bosque seco tropical: un tesoro poco conocido

Con este proyecto también se logrará medir la efectividad de esta estrategia para disminuir la tasa de transformación de los ecosistemas naturales. Con base en los resultados, se espera poder replicarla con todas las Corporaciones Autónomas Regionales del país.