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"Alemania invirtió mucha energía y mucho capital en el sector salud, resistiendo a la tentación mundial de reducir los altos costos requeridos en cuidados intensivos". | Foto: AP

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Coronavirus: ¿Por qué Alemania ha podido contener más la pandemia?

Los alemanes invirtieron a tiempo en su sistema de salud y en sus médicos, y por ahora resisten con más fuerza a la crisis. El embajador Peter Ptassek habla de esa crisis, de por qué decidió ser tuitero, de los parques nacionales y del proceso de paz.

26 de marzo de 2020

Por Cristina Castro 

SEMANA: Alemania es un país que por ahora es ejemplo en enfrentar la pandemia. ¿Cómo ha logrado tener un número tan bajo de muertes? 

Peter Ptassek: Si le soy sincero, ni las autoridades alemanas tienen una respuesta a ese reducido número de muertes. Tampoco hay una explicación para el hecho de que en Corea o en China haya menos muertes que en Italia. Me atrevería a decir que depende mucho de cuándo y a cuántas personas se les empieza a aplicar la prueba. Estamos satisfechos de este bajo número de muertes, sin embargo, debo decir que no hay ninguna garantía de que esta tendencia continúe así. Mucho depende del buen funcionamiento de la atención intensiva en los hospitales. Alemania invirtió mucha energía y mucho capital en este sector, resistiendo a la tentación mundial de reducir los altos costos requeridos en cuidados intensivos. Gracias a Dios. 

El embajador en su oficina en el norte de Bogotá. Foto: Pilar Mejía/ SEMANA

SEMANA: La canciller Angela Merkel aseguró que dos de cada tres alemanes se iban a terminar infectando y que este es el peor desafío desde la guerra.  ¿En qué ayuda a enfrentar la crisis tener el peor escenario contemplado? 

Peter Ptassek: Esta mención que hizo la canciller Merkel hay que tomarla en el contexto que la expresó. De una parte se trataba de dar a entender que a largo plazo muchos serían los infectados, de hecho es una expectativa razonable dado el proceso rápido de infección. Y allí está el otro objetivo del Gobierno alemán, es decir, desacelerar la rapidez con la que se expande el virus. En resumen, lo que transmitió la canciller fue una perspectiva de largo plazo para implementar la estrategia que consiste en ganarle tiempo al virus mientras se descubre la vacuna que permita combatirlo, porque de otro modo el coronavirus se quedará presente en todo el mundo, no se irá automáticamente. 

SEMANA: ¿Cómo ha hecho Alemania para poder implementar con tanta rapidez las pruebas a sus ciudadanos? 

Peter Ptassek: Cuando escuchamos las primeras noticias sobre la propagación del virus hubo una reacción de alerta por parte del Instituto Robert Koch, fundado hace más de cien años, que se ocupa de los temas epidemiológicos en el país. Otra explicación puede venir de las lecciones aprendidas. Por ejemplo, a través del manejo que tuvimos que darle a la gripa aviar y la otra fue la gripa porcina, fueron experiencias de las que les sacamos mucho provecho. En ese entonces incluso sobrevaloramos el efecto dañino de estas infecciones, es decir no fueron tan letales, sin embargo, nos permitieron aprender mucho sobre los procesos de alerta, sobre el trabajo conjunto entre el nivel local, regional y estatal. Por eso, la llegada del nuevo virus no nos tomó por sorpresa, supimos qué hacer. Además, hay que mencionar que en el presupuesto se asignó una suma dedicada a las consecuencias médicas y económicas del coronavirus. En este contexto se da la producción de las pruebas de detección del virus, las cuales a propósito fueron creadas en enero de este año y puestas a disposición de todos los países por el virólogo alemán, Christian Drosten. Alemania está tomando 160.000 pruebas por semana para detectar el coronavirus.

 

SEMANA: El diario El País tituló que Alemania había “enterrado el rigor fiscal” para luchar contra el virus. ¿Cuál es ese paquete de medidas que ha tomado el Gobierno? 

Peter Ptassek: Bueno, no solo Alemania, porque desde la Unión Europea se han levantado algunas normas fiscales que permiten a los países responder ágilmente al nerviosismo de la economía. Y en ese marco actuamos. Y además, somos conscientes de nuestra vulnerabilidad económica, pues dependemos mucho de nuestro entorno, por ejemplo para las exportaciones. Es por eso que tomamos muy en serio la situación actual y del próximo futuro y se toman estas medidas que presentó el mismo ministro de Finanzas Scholz, para salvaguardar, como lo dijo él, las estructuras económicas de la economía alemana. Las medidas van desde apoyos a la gran empresa y a la pequeña empresa, pero también ayudas para los trabajadores.

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SEMANA: Cambiando de tema, usted se ha vuelto muy popular en Twitter. Quizás ningún otro embajador había usado esa herramienta de forma tan activa. ¿Se siente feliz en esa red social? 

Peter Ptassek: No soy una celebridad… Pero es verdad que Twitter ha sido una herramienta extraordinaria para conectarme con Colombia. Es una plataforma que me ha permitido dialogar sin intermediarios. Entiendo que sorprenda porque, hace algunos años, los embajadores se comunicaban de otra manera. Pero este es el mundo que vivimos hoy.

El embajador es un gran fotógrafo. Tiene en su oficina postales extraordinarias de sus viajes por Colombia. Foto: León Darío Peláez

SEMANA: Gran parte de la cercanía que tiene usted hoy con los colombianos se da porque sus fotos, publicadas en esa red, le han mostrado a muchos lo mejor de este país. ¿Cuál es la historia de esas imágenes?  

Peter Ptassek: Mis fotos son una manera de comunicar la forma como veo este país sin utilizar palabras. Las palabras siempre tendrán un contexto específico. Puede ser a veces político, a veces diplomático. Pero esas postales que pongo en Twitter son exactamente lo que le digo: una interpretación del pais, sin palabras. Me han permitido a lo largo de mi vida hablar con la gente en un idioma que me gusta mucho. 

SEMANA: A uno le da la impresión, por esas fotos, que usted conoce Colombia mejor que muchos de nosotros. ¿Qué tanto ha viajado?

Peter Ptassek: Conozco lugares extraordinarios y quisiera conocer más. La semana pasada estuve en la Sierra Nevada. Muchas de esas fotos son en lugares paradisíacos como el desierto de la Tatacoa, pero otras son simplemente en el jardín de mi casa, en la ventana de mi oficina. Cuando yo trabajé en Rusia tomaba retratos de la gente en las calles. En el momento de mi despedida de Moscú hice una pequeña exposición y las reacciones fueron muy conmovedoras para mí. Muchos me dijeron que no podían creer el prisma sobre el cual yo había visto su país. Para mí, la empatía a través de esas fotos es algo más fácil y quizás más útil que escribir comunicados oficiales al Gobierno. Hoy yo tengo la esperanza de que a través de esos nuevos canales de comunicación podemos cambiar en algo el mundo. 

Un paisaje de la Sierra Nevada tomado por el lente del embajador. Foto de su Twitter.

SEMANA: Algunos de esos sitios extraordinarios están hoy en riesgo. Alemania y la Unión Europea son los grandes protectores, por ejemplo,  de los bosques en Colombia. ¿Cómo ven la crisis que se vive en los parques nacionales: incendios, asesinatos, amenazas? 

Peter Ptassek: Colombia tiene una riqueza enorme en biodiversidad.  Esas son riquezas que un país no puede poner en un museo para protegerlas. Se trata de un trabajo mucho más complejo, para el cual los colombianos siempre han contado con nosotros. Lo que creemos es que se necesita construir modelos económicos que aprovechen este tesoro sin destruirlo. Lo que ha pasado en los parques recientemente, por supuesto, nos preocupa. Creemos que es de suma importancia garantizar la seguridad de las selvas, los bosques, los parques de este país. Pero como le dije, no es un trabajo fácil. 

SEMANA: ¿Por qué es difícil?

Peter Ptassek: Por muchos factores, la extensión territorial, lo impenetrable que es la selva y lo costoso que es cuidarla. Usted me habla por ejemplo de los incendios. Y si uno mira lo que ha pasado en el mundo, en Australia o en Brasil, se da cuenta de que a veces ni siquiera toda la humanidad unida logra controlar un fenómeno así. 

 SEMANA: Pero sí se pueden controlar los factores que prenden este fuego…

Peter Ptassek: Sí. Habrá incendios que son incontrolables, pero lo que sí podemos hacer es desincentivar los incendios artificiales, la ganadería ilegal, la minería ilegal y la deforestación ilegal. Para resolver este problema necesitamos compromiso, herramientas y acciones contundentes a mediano y largo plazo. En Colombia, hay un elemento adicional que hace que cuidar el bosque sea más díficil: el posconflicto. 

 "Colombia tiene una riqueza enorme en biodiversidad, pero no la puede guardar en un museo", dice el embajador Peter Ptassek. Foto: Twitter del Embajador de Alemania 

SEMANA: ¿Cómo incide luego el posconflicto en la protección de la naturaleza?

Peter Ptassek: El desarme de las Farc dejó territorios vacíos. El Estado deberá gradualmente ocuparlos. Eso es un gran desafío porque nunca ha habido una presencia del Gobierno en el 100 por ciento del territorio y esa ausencia lleva siglos en este país. Está claro que el cambio no se puede hacer de la noche a la mañana, pero Colombia ha dado pasos fundamentales en este sentido.

SEMANA: Se habla de una preocupación creciente entre países de Europa, como Noruega, el Reino Unido y ustedes. En cierto modo, financian en gran parte la conservación en Colombia y las noticias no son muy alentadoras. 

Peter Ptassek: Es verdad que estamos en constante comunicación entre nosotros. Tenemos que admitir que el balance de lo que estamos haciendo no es el esperado. No podemos dejar que estas fuerzas ilícitas le hagan daño a nuestra política con Colombia para proteger los bosques, no podemos cerrar los ojos ante esa realidad. Este es un tema muy importante para todos. Colombia ha sido un líder histórico en el cuidado de medioambiente, por eso estamos muy orgullosos de ser socios de colombia.

"No conozco otro país que haya tenido un proceso similar", sostiene el embajador frente a los éxitos del proceso de paz. Foto de su Twitter.

SEMANA: Alemania también ha sido un gran amigo del proceso de paz. ¿Cómo ve la implementación? 

Peter Ptassek: El acuerdo de paz está basado en la esperanza de un futuro en paz estable,bajo los principios de legalidad y de protección de la vida. Acabar con un conflicto de más de 50 años es casi imposible en cualquier lugar del mundo y Colombia lo ha logrado. No conozco otro país que haya tenido un proceso similar. Eso es un avance sin precedentes. Me parece que los colombianos tendrían toda la razón de estar orgullosos con lo que han logrado, pero siento que a veces ellos mismos no tienen la vista amplia para entender la dimensión de lo que ha sucedido.

SEMANA: ¿Qué le ha impresionado en estos últimos años en este tema de la paz?

Peter Ptassek: La Comisión de la Verdad. Es un organismo clave en esta travesía para saber qué ocurrió en el país. En este escenario han ocurrido encuentros entre víctimas y victimarios que a mi, en lo personal, me han conmovido. Yo asistí tres años después de la firma de los acuerdos de paz a uno de estos eventos en Cúcuta y Neiva, donde un paramilitar, un representante de las Farc y madres de víctimas hablaron. La madre decía: ¿Qué hiciste con mi hijo? y este paramilitar respondió de una manera muy abierta lo que ocurrió. Me sorprendió que esa madre no pedía justicia, sino saber la verdad sobre lo que ocurrió.

Días antes de que se decretara la emergencia por el coronavirus, el embajador Ptassek había visitado la Sierra Nevada con la Comisión de la Verdad. Foto: Embajada de Alemania.

SEMANA: Desde la experiencia de Alemania después de la Guerra Mundial, ¿qué lecciones cree que podrían ser aplicables a Colombia?

 Peter Ptassek: No es fácil hacer este paralelo entre Alemania y Colombia. Pero podría decir que nosotros sabemos que decir la verdad es algo muy difícil y doloroso. Es decir "yo hice cosas horribles y tengo que vivir con esto en mi conciencia". Y lo que tenemos nosotros en Alemania es una conciencia sobre el pasado, sabemos cómo evitar repetir lo que pasó. “Nunca más” es un lema en nuestro país. Hemos aprendido a construir la paz.

“Nunca más” es un lema en nuestro país, dice el embajador de Alemania. En la foto en el día para enfrentar el olvido del holocausto. Foto de su Twitter.

SEMANA: ¿Y cómo ve desde esa óptica nuestro proceso? 

Peter Ptassek: Colombia ha hecho avances impresionantes en muy poco tiempo. Tres años no son nada, realmente. En Mali, África, llevan trabajando diez años y no han logrado nada en comparación con lo que se ve aquí. Creo que esas experiencias del mundo pueden ayudar a calibrar las expectativas que se tienen en Colombia sobre este proceso. 

SEMANA: Hay una serie de preocupaciones muy graves sobre el proceso de paz. Por ejemplo los asesinatos de los exmiembros de las Farc. ¿Cómo registra eso?

Peter Ptassek: La inseguridad que están viviendo los ex-Farc es efectivamente una preocupación muy grande. Creo que aún faltan explicaciones para poder saber por qué los están asesinando. Lo que podemos decir es que el sistema de seguridad en el que han participado las Naciones Unidas, el ejército colombiano y las ex-Farc había funcionado casi tres años, hasta el final del año pasado que hubo el primer muerto en un ETCR. En la comunidad internacional pensamos que se debe garantizar la seguridad de los excombatientes para no incentivar a las personas que están buscando pretextos para no seguir con la paz digan "vean qué está pasando, no tenemos seguridad por eso tenemos que retomar las armas". Todo lo que podamos hacer para que esto no siga sucediendo, lo haremos.

SEMANA: ¿Qué más hace Alemania en el proceso de paz?

Peter Ptassek: Tenemos un enorme compromiso en muchos aspectos. Estamos apoyando en la institucionalidad. En el sector jurídico colaboramos con la JEP, la Fiscalía y a la Corte Constitucional. Estamos convencidos que Colombia puede enfrentar todos los desafíos que tiene pero necesita una institucionalidad muy fuerte. Sin eso, no habrá justicia, no habrá seguridad y no habrá Estado de Derecho. Por otro lado, estamos contribuyendo a la gran promesa del desarrollo rural. Si hay una alternativa legal a cultivos ilícito eso será atractivo para las familias campesinas. Nosotros estamos invirtiendo mucho en modelos productivos y en capacitación para tener prácticas económicas exitosas. También, como usted misma lo dijo al inicio de esta entrevista, respaldamos a Colombia en su trabajo para detener la deforestación. Estamos constantemente en contacto con el ministerio de Medio Ambiente, con Noruega y Reino Unido. 

SEMANA: De este trabajo en Colombia, ¿qué lección se lleva?

Peter Ptassek: He sido muy feliz en Colombia y quizás lo que más llena el alma es ver la felicidad de los colombianos. Por ejemplo, estuve en las fiestas de San Pacho en Quibdó. Y antes de viajar, muchos me habían hablado de las enormes necesidades de este departamento del pacífico. Sin embargo, allá todo era alegría. Y pensé que es extraordinario una cultura que puede celebrar así. Tan distinta a como somos de preocupados los alemanes.  

 "Lástima que tanta riqueza natural, iniciativas y organizaciones sociales en Cauca se vean opacadas por difícil situación en el departamento", escribió el embajador de Alemania en uno de sus viajes a Popayán, posando al lado de una guama. Foto de su Twitter.