Capturan a 10 presuntos miembros del Clan del Golfo señalados de asesinar uniformados

Una investigación adelantada por la Dijín de la Policía durante 8 meses terminó esta semana con la captura de 10 integrantes del Clan del Golfo, entre ellos, alias Meo, un delincuente vinculado durante más de 10 años al grupo criminal más grande de Colombia, y quien era vital en el control de sus negocios ilegales en el Pacífico.

Los investigadores llegaron a esa decena de personas luego de interceptar sus llamadas, escuchar testigos e identificarlos en terreno. Las pesquisas condujeron a la reconstrucción del camino criminal de Meo. Según la Policía, se vinculó al clan en 2008 y escaló hasta convertirse en en el jefe financiero en el Chocó. Sin embargo, una pelea por plata con otro de los líderes de la estructura, terminó en su traslado al Urabá.

Allí estuvo hasta 2015, cuando por orden de Otoniel, el criminal más buscado de Colombia, volvió al Chocó, para dirigir todo el brazo financiero del clan en el Pacífico. En esa zona, la estructura que dirigía generaba el 80 por ciento de los recursos del grupo, a través del narcotráfico y la extorsión.

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Pero a Meo y los demás capturados no solo se les investiga por esos delitos. Además, se les sindica de haber emboscado y asesinado a un soldado del Ejército en el municipio de Istmina, y a un policía en la vía Yuto-Ceregueti, también en Chocó. Esos homicidios habrían sido perpetrados durante el paro armado dl 2016, y como respuesta a la muerte de alias Guagua, uno de los máximos jefes del Clan del Golfo.

También son señalados de otras acciones, como la quema de dos buses en 2015, que se suman a un amplio dossier de acusaciones por el que tendrán que responder ante la justicia.