Home

Nación

Artículo

Goebertus trabajó en la mesa de La Habana temas de justicia transicional. De ahí saltó a la Cámara a “defender la paz”. | Foto: JUAN CARLOS SIERRA - SEMANA

POLÍTICA

Juanita Goebertus, una joven estrella

Estrenó la réplica a una intervención presidencial –sobre las objeciones del gobierno a la JEP– y proyectó un nuevo liderazgo. Esta es su historia.

16 de marzo de 2019

El país no estaba acostumbrado a que luego de un discurso presidencial viniera una réplica de la oposición. Ese mecanismo, contemplado en el estatuto derivado de los acuerdos de La Habana, debutó el martes después de las objeciones anunciadas por el presidente Iván Duque ante seis de los artículos de la ley estatutaria que reglamenta la JEP.

Lo más llamativo fue la manera de hacerlo. La opinión estaba acostumbrado a ver a la cabeza de la oposición a figuras con largas trayectorias y presencia mediática tipo Jorge Enrique Robledo o Gustavo Petro. Pero esta vez, respaldada por ellos, protagonizó el derecho de réplica una joven de 35 años que acaba de llegar al Congreso: Juanita Goebertus, quien el año pasado llegó a la Cámara de Representantes con más de 83.000 votos, una votación estrepitosa para una novata. Para conseguirla no tuvo reuniones comunitarias, ni ediles ni concejales que ejercieran de capitanes en su campaña. Se limitó a recorrer las calles de la ciudad repartiendo volantes en compañía de Claudia López y Angélica Lozano, quienes tienen un capital político consolidado en Bogotá.

Goebertus también hizo campaña en redes y en medios alternativos. Su perfil técnico y poco populista demuestra que la política ha cambiado. Además de que es una outsider en todo el sentido de la palabra, ganó su curul con la bandera de defender el acuerdo de paz. Pero para eso no se enfrentó al uribismo, ni se alió con el petrismo. Su decisión –criticada por muchos en medio de la polarización de la campaña—fue votar en blanco. Lo hizo en consecuencia con la de su candidato presidencial, Sergio Fajardo.

Le puede interesar: “Las objeciones a la JEP son una pérdida de tiempo”: Juanita Goebertus

La distancia de los extremos precisamente llevó la semana pasada a los partidos de oposición, incluyendo a la Farc, a acordar que ella pronunciara la réplica a la alocución presidencial. Entre el domingo, cuando habló Duque, y el martes, cuando ella presentó la réplica, Juanita se concentró con su equipo a responder uno a uno los argumentos del mandatario. También hizo complejas elaboraciones jurídicas que terminaron por inspirar a Defendamos la Paz, un movimiento que aglutina a más de cien líderes de opinión a nivel nacional que se organizaron para defender el acuerdo en Colombia y en el exterior.

Juanita Goebertus se define como una persona apegada a los argumentos, alejada de las pasiones “y que está siempre pensando en la manera de encontrar consensos”. En el recinto de la Cámara se sorprenden del buen trato que, por ejemplo, ha tenido con Alejandro Carlos Chacón, presidente de la corporación y ligado más a la política tradicional que a la de opinión. Con él descubrió que el trámite de la ley estatutaria de la JEP se estaba enredando en el Senado y que en el texto que esa corporación le iba a enviar al presidente faltaba un pedazo de lo discutido en el Congreso. También juntos trabajaron parte de las preguntas que la semana pasada la Cámara le envió a la Corte Constitucional acerca de la legalidad de darle trámite a esas objeciones.

“Llegué al Congreso con el único propósito de defender la paz”, asegura Goebertus mientras recuerda que lleva la mayor parte de su vida profesional trabajando para ello. Llegó al servicio público de la mano del exnegociador Sergio Jaramillo cuando este fue viceministro de Defensa de Juan Manuel Santos. Después, cuando Santos llegó a la Presidencia y nombró a Jaramillo comisionado de paz y miembro del equipo negociador con las Farc, Juanita empacó maletas y se fue a trabajar a su lado, esta vez en La Habana. Allí coordinó temas de justicia transicional y posteriormente asesoró los relacionados con reparación a las víctimas. Por la complejidad de esos aspectos de la negociación, tuvo con las Farc una relación tensa. Sin embargo, la semana pasada este grupo, convertido en partido, también estuvo de acuerdo en que ella llevara la vocería para responder al presidente.

Le sugerimos: “Las objeciones a la JEP sí afectan la paz”: Oposición estrenó derecho de réplica al presidente Duque

Hoy la representante divide sus días entre trajinar en el Congreso, explicar los temas a la opinión pública, defender la paz y llevar su vida familiar. Es hija única y aunque su padre vive en Santa Marta trata de buscar todos los espacios que pueda para, como dice ella, “parchar con los papás”.

Independientemente de los caminos que vaya tomando la oposición en lo que queda de este Gobierno, el martes quedó claro que los defensores del Sí tienen ahora un nuevo liderazgo. Y que habrá Juanita Goebertus para rato en la política.