¿Saldrá indemne Bernardo Moreno de las ‘chuzadas’?

En el banquillo de los acusados volverá a estar el exsecretario jurídico de la presidencia Bernardo Moreno y los abogados de la exdirectora del DAS María del Pilar Hurtado, quien continúa prófuga en Panamá, a donde huyó cuando se destapó este escandaloso episodio.

Aun cuando la Fiscalía ha hecho esfuerzos descomunales para acusar a estos exaltos funcionarios del Gobierno anterior, el proceso no juega a su favor en el caso de Bernardo Moreno, quien para los entendidos podría salir indemne ya que las pruebas presentadas hasta ahora no son concluyentes para responsabilizarlos en las chuzadas.

La Fiscalía General de la Nación acusó formalmente a Bernardo Moreno Villegas en junio del año 2011. En su momento se habló de cerca de 30.000 folios de documentos y 130.000 archivos contenidos en varios medios de almacenamiento, en los cuales se presumía la responsabilidad de Moreno en las órdenes para realizar interceptaciones a políticos, periodistas y líderes de oposición.

La expectativa del país frente la tremenda revelación sobre las interceptaciones ilegales, era tan grande, que el mismo jefe de Estado de la época, Álvaro Uribe Vélez, pidió celeridad a los magistrados, que en su mayoría tuvieron que declararse impedidos para conocer el caso: ellos mismos habían sido víctimas de las chuzadas.

El proceso ha tenido varios cambios de fiscal. Misael Rodríguez, como octavo delegado ante la Corte, fue el primer funcionario del ente acusador que tuvo conocimiento del proceso. Posteriormente la misma fiscal de aquel entonces, Viviane Morales, asumió el proceso. Al frente del caso también ha estado la fiscal segunda delegada ante la Corte, María Victoria Parra Archila, quien asumió desde el mes de noviembre del 2012.

En agosto del 2012, se instaló formalmente el juicio contra los exfuncionarios, con un testigo estrella de la Fiscalía, el perito Ancizar Barrios quien tardó ocho meses en rendir testimonio ante la Sala Penal de la Corte Suprema. De paso, se convirtió en el ‘salvavidas’ de Moreno, ya que en múltiples declaraciones negó participación alguna del funcionario relacionada con las interceptaciones ilegales.

Al ver que el proceso se derrumbaba, la fiscal en propiedad de proceso, María Victoria Parra, tomó decisiones radicales para buscarle un orden al proceso. Por lo cual sacó un ‘as’ bajo la manga relacionado con 45 nuevas pruebas que tenía engavetadas y con las cuales pretendía demostrar las posibles responsabilidades de Moreno en las interceptaciones ilegales.

Dentro de esas 45 evidencias existían dos capetas denominadas ‘Paseo’ y otra ‘Carpeta 0’ integradas por cerca de 3.000 documentos en los cuales se relacionaban informes de la UIAF, misiones de trabajo del DAS, cruces de comunicaciones, oficios de solicitud y respuesta, consultas en bases de datos, certificados de existencia y representación, certificados de libertad y tradición entre otros. Con esta carta la Fiscalía se jugaba el todo por el todo, para recomponer el camino, pero parece que la cosa no anda bien.

En la última declaración del testigo estrella, el pasado 2 de abril, quedó sepultada la esperanza de la Fiscalía por demostrar alguna orden directa, o instrucción de Moreno para realizar interceptaciones ilegales. El testigo repitió la palabra “no” en todo su testimonio al señalar que en ningún registro aparece el nombre del exfuncionario.

El exsecretario de presidencia Bernardo Moreno, se encuentra en libertad desde el pasado 12 de marzo cuando el Tribunal le concedió el beneficio al evidenciar que no representaba un peligro para la sociedad. Ahora parece que la suerte se inclina a su favor.

Fuentes de la Fiscalía consultadas por Semana.com, reconocen la actual realidad del proceso: “Las pruebas van enfocadas hacia María del Pilar Hurtado y nocontra Bernardo Moreno”.

En esta nueva etapa del juicio que inicia este jueves a las 2:30 de la tarde, la batalla estará por parte de la Fiscalía la cual debe recomponer su camino para enfocarse en las pruebas que le permitan demostrar que Bernardo Moreno si tenía conocimiento de las interceptaciones ilegales. Por el otro lado, el abogado Jaime Granados, con toda su artillería, intentará demostrar que no existe prueba alguna que comprometa a su cliente.