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Juan Manuel Santos habló en los 60 años del diario económico La República. | Foto: Presidencia.

POLÍTICA

Santos pidió a empresarios que le dejen continuar “dirigiendo el barco”

El presidente también habló de las pruebas PISA que ayudarán a “pellizcarnos” y relacionó la paz con su reelección.

3 de abril de 2014

Frente a empresarios el presidente Juan Manuel Santos hizo dos pronunciamientos que dejaron a los asistentes de la celebración de los 60 años del diario La República pensando en el futuro de Colombia.

Por un lado, el mandatario de los colombianos dijo que lejos de preocuparle, le pone feliz conocer los resultados de las pruebas PISA que le entregaron el último lugar al país. "Nos ayuda a pellizcarnos". Para el jefe de Estado ese resultado le impone la meta de trabajar para poder ser más “competitivos”.

"Tenemos que ponernos metas ambiciosas y compararnos con los mejores para entrar Organización para la Cooperación y el desarrollo Económico (OCDE)", aseguró Santos.

Pero la declaración no quedó allí. Santos, quien intervino en el Club El Nogal de Bogotá, también habló de la campaña para su reelección, la que asoció con la paz.  

"Dicen que en campaña hay que llegarle al corazón de la gente, pero a ustedes les voy a llegar con el corazón. Les pido que me permitan continuar dirigiendo el barco", resaltó el presidente a los empresarios.

El jefe de Estado llamó la atención de los empresarios sobre las grandes ventajas que tendría la economía si se logra la paz.

“¿Cuál es su mayor reto?" "Es el reto de la paz”, expresó el presidente Santos al referirse a la pregunta formulada por periodistas extranjeros sobre los objetivos que le quedan a Colombia por alcanzar en materia económica.

El mandatario habló sobre los “retos enormes” que tiene el país, en los cuales se ha venido trabajando, pero dijo que aún “hay que multiplicar resultados”, en alusión a la desigualdad social, el desempleo, la seguridad ciudadana y la situación del campo colombiano.

“Desde el punto de vista económico, es el mejor negocio”, ya que trae una cantidad de consecuencias positivas de todo tipo, como “dejar de matarnos los unos a los otros, de ir cicatrizando heridas, de reconciliarnos como sociedad”, puntualizó.