Regalos de Navidad

COMO UNA AUTENTICA PRIMICIA periodística, he logrado establecer al milímetro lo que el Niño Dios tiene planeado traerles a conocidos personajes de la vida nacional. Aquí está la lista:
A Juan Manuel Santos, ministro de Comercio Exterior: el espejo de la madrastra de Blanca Nieves.
A Ernesto Samper: "Memorias del Revolcón II". (¡Güepaje!).
A Karl Troller y Eduardo Arias: después de su éxito de la revista Semana, les regalarán de Navidad la dirección de la revista Croamos.
A Roberto Posada, columnista de El Tiempo: una oficina en el Congreso con nevera, betamax, televisor, radiocasetera y una suscripción a la revista Croamos con televisor portátil incluido.
A Alberto Zalamea, actual director de Croamos (sic): unas escalinatas, para que no siga perdiendo altura.
A Rafael Pardo, ministro de Defensa: un regalo de todo corazón.
A María Izquierdo, senadora: una cerca.
A Miguel Angel Bermúdez: una ducha de agua fría.
A doña Tera: un detector de mentiras.
A Jaime Castro, alcalde de Bogotá: un refugio en Moniquirá.
A Bogotá: lo que sabemos.
A Darío Arizmendi: el teleobjetivo que no le trajeron el año pasado para mirar a la distancia el periodista que dejó atrás.
A Julio Sánchez Cristo: una línea abierta con Arizmendi.
A Augusto López, presidente de Bavaria: textualmente dice así su carta al Niño Dios: "Para estas navidades quiero pedirte un Ministro de Hacienda nuevo, un telefonito celular, una rebajita al impuesto de la cerveza, una cadenita de televisión, unas cuñitas para TV Cable, unas gaseositas bien ricas, una casita nueva para Universal Televisión, otra para Tevecine, otra para Cinevisión, otra para NTC, un satelitico para el Noticiero Nacional, y todo lo demás que el Niño Dios quiera traerme '.
Al Noliciero Nacional: el destape.
A CM&: la noticia.
A Yamid: que vuelva a Amat a la competencia.
A Juan Gossaín: una luciérnaga.
A Mauricio Vargas: un cepillo nuevo (mal pensados: para limpiar el tierrero que le quedó después del revolcón de las Memorias).
A William Jaramillo, ministro de Comunicaciones: un dimmer para el temperamento.
A Andrés Pastrana: unas ideítas para ese bigotico.
A los quíntuples: un bigotico.
Al Congreso: unos periodistas de bolsillo.
A César Gaviria: un seguro antirreelección.
A Luis Alberto Moreno, ministro de Desarrollo: un disfraz de ex ministro para ir a Caracas.
A Carlos Ossa: la misma "cossa".
A Danilo Santos, actor: un reloj de Mickey Mouse.
A Gabriel García Márquez: un exorcista, a ver si le saca por fin el amor y otros demonios.
A Antanas Mokus: una semana de bronceado en una playa nudista. Hay que estar preparados para la próxima vez.
A Noemí Sanín: una edición revisada del diccionario de lugares comunes.
A Faustino Asprilla: una buseta de Co-PETRA-n.
A mí misma: ganas para votar en las próximas elecciones; templanza para resistir los embates del Congreso; una inscripción a la revista Croamos (por lo del televisor portátil), y todo lo demás que el Niño Dios quiera traerme.