Salud
MinSalud se mete en polémica por datos errados expuestos por Petro, quien señaló como responsables a “quienes hicieron los cuadros”
“Desde el principio se manifestó de manera explícita que los datos de 2024 y 2025 son preliminares”, justificó el Ministerio de Salud mediante un comunicado.

El Ministerio de Salud emitió un comunicado luego de que el presidente Gustavo Petro, en su denominada alocución, se refiriera a los datos que expuso y que, aceptó, contenían errores.
“Vamos a hablar de otro tema, pero quería defenderme de la crítica porque es injusta en la mayor parte. Si hubo problemas matemáticos de quienes hicieron los cuadros, fueron mínimos”, dijo Petro, buscando desestimar las críticas hechas por la Asociación de Epidemiología de Colombia a los datos que él expuso sobre la salud en el país.
Posteriormente, se dedicó a hacer una presentación sobre educación pública y privada en su gobierno, criticando a sus detractores, a la prensa nacional y exponiendo una cantidad de cifras que dan cuenta, según su presentación, de lo bien que va su administración en términos de educación. Dicha exposición también terminó desmentida.
La Asociación de Epidemiología de Colombia presentó un informe en el cual cuestionó, de forma certera, las cifras que el presidente Gustavo Petro presentó durante la denominada ‘Alocución presidencial sobre salud’, el 27 de agosto pasado.
Esta fue la alocución del jefe de Estado:

“En la noche del miércoles 27 de agosto de 2025, en alocución nacional, se presentaron cifras sobre condiciones y avances en materia de salud en Colombia. Estas cifras, por su relevancia, deben comunicarse con el máximo rigor técnico y transparencia. Sin embargo, se observó que en la manera en que fueron expuestas al público se incurrió en prácticas que distorsionan la magnitud de los cambios, como la utilización de cifras absolutas sin ajuste poblacional para comparaciones en el tiempo, uso inadecuado de los tipos de gráficas y la omisión del contexto epidemiológico, entre otros”, aseguró el organismo.

Adicionalmente, indicó el organismo, “los años elegidos como punto de comparación corresponden en varios casos al periodo de pandemia o pospandemia. Esto desconoce que muchas de las reducciones observadas responden a un patrón global y también nacional, independiente de una política pública específica. Atribuir cambios de esta magnitud exclusivamente a la gestión de un gobierno constituye una interpretación técnicamente inadecuada. Para una evaluación rigurosa, los puntos de comparación debieron incluir períodos prepandémicos”.
“Estas formas de representación gráfica y estadística pueden generar percepciones erróneas sobre los avances, lo que afecta la confianza pública en las instituciones y dificulta la evaluación rigurosa de las políticas. Por eso, es importante recordar que la representación visual importa. No es adecuado comparar cifras absolutas. Variables continuas como los años deben representarse con líneas o histogramas, no con barras que confunden categorías. Asimismo, los ejes deben respetar proporciones reales para no inducir al error en la interpretación. Colombia ha mostrado avances en varios indicadores de salud, pero no siempre es correcto atribuir estos logros a una sola política pública", agregó.

“En epidemiología se utilizan herramientas como Joinpoint, que ayudan a identificar puntos de inflexión y confirmar si los cambios son estadísticamente significativos o se usan Análisis de las series de tiempo interrumpidas (STI) para evaluar el impacto de una intervención, política pública o evento externo sobre los cambios de un indicador a lo largo del tiempo. Estos abordajes metodológicos brindan rigor y transparencia y evitan interpretaciones sesgadas sobre la situación de salud de un país”, aseveró la entidad.
“En conclusión: sí existen datos de calidad (si bien es necesario continuar mejorando). Las estadísticas pueden generar lecturas equivocadas si no se representan adecuadamente. El análisis debe hacerse con rigor metodológico, claridad en las muestras y desagregación territorial. Los logros locales deben reconocerse más allá de colores políticos. Los indicadores de salud mejoran solo con ejecución presupuestal clara y articulación interinstitucional real. Los datos son una herramienta poderosa que deben ser usados con rigor y responsabilidad. Solo así pueden ayudar a orientar decisiones basadas en evidencia y fortalecer la confianza pública con y entre las instituciones”, puntualizó la Asociación de Epidemiología de Colombia.

Bajo este contexto, el Ministerio de Salud emitió el siguiente comunicado, con siete puntos, respondiendo a la controversia:
Luego de las afirmaciones realizadas por la Asociación Colombiana de Epidemiología (Asocepic), en las que se plantea que las cifras sobre avances en salud pública presentadas en la alocución presidencial del 27 de agosto de 2025 habrían sido utilizadas de manera inadecuada, el Ministerio de Salud y Protección Social reafirma que los datos expuestos corresponden a información oficial, analizada con total responsabilidad y rigor técnico.
Esta cartera reitera su compromiso con la transparencia, el acceso abierto a la información y el fortalecimiento del análisis técnico en salud pública. El uso de los indicadores en la alocución presidencial tenía el firme propósito de informar a la ciudadanía sobre el estado de la salud pública del país, en un lenguaje claro y comprensible, sin sacrificar la validez de la evidencia ni el fundamento científico de los análisis.
Este ejercicio constituye una acción sin precedentes por parte del gobierno del presidente Gustavo Petro, orientada a dar a conocer de manera transparente cómo avanza la salud pública en el país y a acercar a la ciudadanía a la información sobre los resultados de las políticas en curso.
Las cifras utilizadas por este Ministerio provienen de fuentes oficiales como el Sistema de Vigilancia en Salud Pública (Sivigla), el Registro Único de Afiliados Nacimientos y Defunciones (Ruaf-ND) y el registro de estadísticas vitales (EEVV) del Dane.
Asimismo, desde el principio se manifestó de manera explícita que los datos de 2024 y 2025 son preliminares, condición habitual en los sistemas de vigilancia. No obstante, la transparencia, trazabilidad y validez de estas fuentes garantizan que cualquier investigador, profesional de la salud o ciudadano pueda acceder y verificar la información.
Cabe destacar que esta cartera realiza un seguimiento semanal y riguroso de los indicadores, lo que permite tomar decisiones oportunas en materia de políticas públicas. La reducción observada en varios de ellos ha sido confirmada incluso bajo la condición de datos preliminares, y responde a la implementación de programas y políticas diseñadas para ese propósito. Cuestionar la forma de presentación de la información no puede desconocer los avances logrados ni invalidar la evidencia disponible.
En consecuencia, este Ministerio se permite hacer varias precisiones ante los señalamientos de Asocepic, que advierte sobre supuestos errores en el manejo de datos epidemiológicos, tales como la selección sesgada de información, el uso de promedios engañosos, manipulación de gráficas mediante ejes truncados o proporciones exageradas, etc.
Frente a estas afirmaciones, esta cartera aclara lo siguiente:
- No hay selección sesgada de datos. Los indicadores corresponden a trazadores en salud pública, y priorizarlos no constituye un sesgo metodológico.
- No se presentaron promedios engañosos. El análisis no requirió medidas de tendencia central; los datos provienen de fuentes oficiales y públicas.
- No hubo manipulación gráfica. Las gráficas se diseñaron para facilitar la comprensión a audiencias no expertas y facilitar su difusión a través plataformas y medios tanto digitales como televisivos, sin alterar el comportamiento de los indicadores.
- No hubo lenguaje ambiguo. El término “significativo” se usó en su acepción común para resaltar cambios importantes, no en un sentido estadístico.
- No hubo análisis de correlación. Nunca se sugirió relación causal entre variables, solo se mostraron tendencias a lo largo del tiempo.
- No hubo generalizaciones apresuradas. Los indicadores se construyen con el total de defunciones registradas y denominadores oficiales, no con muestras pequeñas.
- No se omitió el contexto. Se presentaron datos desde 2018, abarcando el periodo prepandémico y los años posteriores, lo cual otorga un marco comparativo suficiente y transparente.
El Ministerio de Salud y Protección Social reitera su disposición de entregar y facilitar el acceso de los datos a todos los interesados, en coherencia con su política de transparencia y acceso a la información pública. Este ejercicio fortalece el conocimiento técnico, la investigación y el debate informado en salud.
De igual forma, esta cartera hace un llamado a la corresponsabilidad en el uso de la información y en el manejo del lenguaje. Adjetivos imprecisos o malintencionados pueden distorsionar la percepción ciudadana y debilitar la confianza pública. Las discusiones técnicas deben sostenerse en un marco de rigurosidad, ética y responsabilidad, en beneficio de la ciudadanía y del sistema de salud.
Este Ministerio resalta que este ejercicio de información pública refleja las transformaciones que viene impulsando el gobierno del cambio del presidente Gustavo Petro hacia una salud más digna y cercana a las comunidades.
Así lo señaló el jefe de Estado durante su alocución: “Lo que muestran estas cifras es la importancia de movernos a un modelo de salud que salve más vidas, que cuide a las mujeres gestantes y a los niños en los territorios más pobres y apartados del país. Estos resultados son la prueba de que vamos avanzando por buen camino hacia una Colombia más justa, donde la salud con dignidad sea un derecho garantizado para todos y todas”.