Parque tayrona
Parque Nacional Natural Tayrona, en Magdalena (Colombia) (Photo by Thierry Tronnel/Corbis via Getty Images) | Foto: Corbis via Getty Images

MEDIO AMBIENTE

El Parque Nacional Natural Tayrona descansará de los humanos

Al igual que se ha hecho en otras oportunidades, se busca que este espacio se recupere.

15 de octubre de 2021

Parques Nacionales Naturales de Colombia informó este 15 de octubre que, desde este martes 19 de octubre y hasta el martes 2 de noviembre, se cerrará temporalmente, se prohibirá el ingreso de visitantes y la prestación de servicios ecoturísticos en el Parque Nacional Natural Tayrona, en el marco de la campaña #RespiraTayrona.

Esta campaña es una estrategia de conservación concertada con los pueblos indígenas Kogui, Wiwa, Arhuaco y Kankuamo, pertenecientes a la Sierra Nevada de Santa Marta y está encaminada a darle un respiro a la biodiversidad presente en la zona, a permitir la regeneración de los procesos naturales de las playas, de los ecosistemas y de las especies que habitan allí, así como para que estos pueblos puedan realizar los procesos culturales de limpieza, sanación y protección ambiental y espiritual.

Durante el cierre, los guardaparques y aliados realizarán diferentes actividades que permitirán continuar con los procesos de protección y conservación que adelanta el área protegida. “Durante los 15 días en los que Tayrona estará cerrado al público, Parques Nacionales Naturales invita a las personas que han visitado anteriormente el Parque, a que a través de sus redes sociales y con el #RespiraTayrona, se sumen a esta temporada de descanso del área protegida con sus fotos, rindiendo un homenaje al cuidado del patrimonio natural y cultural de los colombianos”, señaló el organismo.

Parque tayrona
Parque Nacional Natural Tayrona, Magdalena State, Colombia (Photo by Thierry Tronnel/Corbis via Getty Images) | Foto: Corbis via Getty Images

En febrero pasado tuvo lugar una iniciativa de las mismas características. Posteriormente se hizo del primero al 15 de junio. El silencio, la tranquilidad y la paz que lograron sentirse en el Parque Nacional Natural Tayrona, tras sus cierres dos veces por 15 días, impulsaron a salir a la fauna silvestre que habita en este mágico lugar. Sin temor, los animales retornaron a los árboles, el mar, las plantas. Luego de este “descanso” de los visitantes y de la prestación de servicios ecoturísticos, esta área natural logró realmente respirar, después del gran flujo de turistas que suele tener.

Producto de esa calma varias especies se dejaron ver por parte de los guardaparques. Un mono aullador, dos caimanes aguja y un oso perezoso fueron tan solo algunos de los animales que se dejaron ver. En cierres pasados, los guardianes de esta área protegida aprovecharon el cierre para realizar diferentes actividades, entre las que se encuentraban la instalación de cámaras trampa en sectores como Bahía Concha y Gayraca para el monitoreo de medianos y grandes mamíferos.

Ciudad Perdida cuenta con un complejo sistema de construcciones, caminos empedrados, escaleras y muros que se intercomunican por terrazas donde se construyeron centros ceremoniales y casas. Se calcula que en total son 150 hectáreas, en las cuales se pueden encontrar hasta 169 terrazas de piedra. Debido a su carácter arqueológico, este lugar es administrado por el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH) como Parque Arqueológico Nacional.
Ciudad Perdida cuenta con un complejo sistema de construcciones, caminos empedrados, escaleras y muros que se intercomunican por terrazas donde se construyeron centros ceremoniales y casas. Se calcula que en total son 150 hectáreas, en las cuales se pueden encontrar hasta 169 terrazas de piedra. Debido a su carácter arqueológico, este lugar es administrado por el Instituto Colombiano de Antropología e Historia (ICANH) como Parque Arqueológico Nacional. | Foto: Getty Images/iStockphoto

De igual manera, en Gayraca se realizaron jornadas de toma de datos para el proyecto “Sucesión vegetal en bosque seco”, llevado a cabo con el apoyo de la Universidad del Magdalena. Por otro lado, Orlando Molano, director de Parques Nacionales Naturales, se reunió con el equipo del área con el fin de buscar cómo mejorar los diferentes procesos llevados a cabo para la protección y conservación del parque, así como para escucharlos y conversar con ellos sobre cómo adecuar sus instalaciones y reconstruir un esquema de trabajo que permita mejorar sus condiciones laborales y su calidad de vida.

Los pueblos indígenas que habitan en esta región también aprovecharon para realizar sus pagamentos y trabajos tradicionales en sus sitios sagrados en pro de proteger cultural y ambientalmente el territorio, a partir de la sabiduría ancestral impartida por los Mamos de la Sierra Nevada de Santa Marta. Los cierres se han constituido en una oportunidad para que Parques Nacionales, los prestadores de servicios ecoturisticos, los pueblos indígenas y los gremios dialogaran, en aras de la mejora continua de los servicios y las actividades ecoturísticas enfocadas a la conservación del parque.

De esta manera, se busca la recuperación natural de esta área protegida creada en 1964 y conformada por 15.000 hectáreas, que alberga 59 especies de mamíferos, 396 aves y varios reptiles como cuatro especies de tortugas marinas (Caretta caretta, Chelonia mydas, Eretmochelys imbricata y Dermochelys coriacea), una serpiente (Boa constrictor) y caimanes aguja (Crocodylus acutus), siendo la del Parque una de las pocas poblaciones presentes en el Caribe colombiano. Adicionalmente, es posible hallar más de 770 especies diferentes de plantas en los bosques secos, húmedos y nublados que hacen parte del parque. En la franja marítima de esta área protegida también se encuentran distribuidas más de 350 especies de algas, al igual que moluscos, crustáceos y corales. Pasados los 15 días se podrá regresar con todas las medidas de bioseguridad dispuestas por Parques Nacionales Naturales.