El consumo de esta fruta contribuye al buen funcionamiento de los huesos, dientes, músculos, articulaciones y algunos tejidos conectivos. | Foto: Foto archivo Semana

Vida Moderna

Cáscara de mandarina: ¿cuáles son sus propiedades y beneficios para la salud y la piel?

La cáscara de mandarina solo se debe poner en agua hirviendo para preparar una infusión.

20 de julio de 2021

La mandarina proviene del árbol mandarino y es una fruta cítrica que tiene vitamina A, vitamina C, vitamina B1 y B2, potasio, calcio, fósforo y magnesio.

Además, es rica en antioxidantes, los cuales son capaces de retardar o prevenir algunos tipos de daños a las células.

De acuerdo con el nutricionista del Policlínico HM Moraleja (Madrid, España) y creador del Método Equidieta, Javier Martínez, el consumo de una dieta rica en antioxidantes naturales es fundamental para reducir la inflamación, reforzar el sistema inmune y prevenir el envejecimiento celular que lo debilita, sobre todo en el caso de los adultos mayores.

Además, esta fruta es beneficiosa para la piel, pues ayuda sintetizar el colágeno y esto además contribuye al buen funcionamiento de los huesos, dientes, músculos, articulaciones y algunos tejidos conectivos.

No obstante, la cáscara de mandarina también se puede consumir y solo se debe poner en agua hirviendo.

Esta infusión también tiene muchos beneficios, pues un estudio publicado en la revista Science Daily reveló que consumirla reduce el riesgo de padecer diabetes tipo 2, ateroesclerosis y enfermedades cardiacas.

Asimismo, la cáscara de mandarina es un anticancerígeno, según una publicación del portal web MUI y esto se sería por los efectos del óxido nítrico.

Otro beneficio es que contribuye a la digestión, ya que aumenta la absorción de nutrientes y contribuye a la descomposición de alimentos. También es diurética por su alto cometido de agua.

De igual forma, fortalece el sistema inmunológico para proteger al cuerpo contra las enfermedades por su contenido de vitamina C.

Información nutricional por 100 g

- Calorías: 53

- Carbohidratos:13,3 g

- Azúcares: 10,6 g

- Proteínas: 0,8 g

Grasas: 0,3 g (saturadas 0,039 g - trans 0,00 g)

- Fibras: 1,8 g

- Sodio: 2 mg

- Potasio: 166 mg

- Agua: 85,17 g

- Retinol (vitamina A): 34 μg (4 %)

- Tiamina (vitamina B1): 0.058 mg (4 %)

Otras propiedades y beneficios de la mandarina

- Previene el daño causado por los radicales libres.

- Antiséptica.

- Antiviral.

- Rica en potasio, sustancia que reduce la presión arterial y promueve un flujo sanguíneo más sano, previniendo la formación de coágulos sanguíneos.

- Ayuda en la prevención del exceso de grasa en nuestro cuerpo, principalmente en el hígado.

- Ayuda a bajar el colesterol malo y promueve el buen colesterol.

- Mejora el sistema renal.

- Beneficiosa para la vista, ya que ayuda a prevenir la degeneración macular relacionada con la edad.

Asimila el hierro, pues este es un mineral necesario para el crecimiento y desarrollo del cuerpo. “El cuerpo utiliza el hierro para fabricar la hemoglobina, una proteína de los glóbulos rojos que transporta el oxígeno de los pulmones a distintas partes del cuerpo, y la mioglobina, una proteína que provee oxígeno a los músculos. El cuerpo también requiere hierro para elaborar hormonas y tejido conectivo”, explicó el Instituto Nacional de Salud (NIH por sus siglas en inglés).

- Contribuye al control del peso corporal, ya que otorga una mayor saciedad.

- Ayuda a equilibrar el nivel de azúcar en la sangre.

- Ideal para las dietas balanceadas de pérdida de peso, ya que contiene pocas calorías y para perder de peso los expertos recomiendan tener un déficit calórico que es cuando las personas consumen menos calorías que las que gasta en el día a día. la clave está en alimentarse de manera saludable sin necesidad de hacer dieta.

- Reduce la producción de cortisol, la hormona del estrés, que puede influir en el almacenamiento de grasa corporal.

Finalmente, hay que señalar que el consumo diario de frutas y verduras por persona debería ser de cinco porciones (mínimo 400 gramos por día), según recomendaciones de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés) y la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS).