anticoncepcion

Una T más sofisticada

A diferencia del tradicional dispositivo, Mirena no provoca cólicos y casi elimina el sangrado menstrual. El único lunar, su alto costo.

20 de octubre de 2002

Muchas mujeres han encontrado en la T de cobre un buen aliado para la contracepción. Para algunas es el método ideal porque tiene efectividad durante varios años y, por lo tanto, no exige que ellas estén pendientes de tomar pastillas o comprar productos para evitar un embarazo no deseado. Pero para otras no es un método ideal porque causa ciertos efectos indeseados como, por ejemplo, sangrado abundante, menstruaciones más largas, cólicos e inflamación. Teniendo en cuenta esta situación la compañía farmacéutica Schering se dio a la tarea de investigar un producto que eliminara los problemas asociados del dispositivo de cobre. El resultado fue una T mucho más cómoda pues no genera dolores ni cólicos y, en lugar de aumentar el sangrado, lo quita completamente. Este producto está en el mercado mundial hace más de 15 años pero sólo hace dos llegó a Colombia.

El sistema -conocido como Mirena- es tan sofisticado que muchos ni siquiera lo comparan con la vieja T. Lo único que tiene en común es su forma pero este nuevo método es muy diferente en el modo de actuar. En lugar de cobre tiene una cápsula con una hormona conocida como levonorgestrel que se va liberando en pequeñas dosis diarias y actúa a nivel local sobre el útero. Por eso no tiene efectos secundarios en el sistema como sucede con otros anticonceptivos hormonales. Sólo se ha encontrado que en un 3 por ciento de ellas se escapa algo de la hormona al torrente sanguíneo, causando eventualmente dolor en los senos, cambios en el estado de ánimo y acné, pero según los expertos estos síntomas son pasajeros.

El levonorgestrel actúa en dos frentes para evitar la fecundación: por un lado vuelve más espeso el moco cervical e impide el paso de los espermatozoides y, en caso de que uno de ellos escape a este control, la hormona tiene la capacidad de inmovilizarlo para evitar que suba a fecundar. Según datos estadísticos la tasa de embarazos acumulados con este endoceptivo en tres años es de 0,2 por 100 usuarias mientras que la del dispositivo intrauterino de cobre varia de 0,5 a 5 por 100 usuarias.

Pero lo que atrae de este producto es la posibilidad que ofrece a las mujeres de poder liberarse de la tiranía del período. La hormona bloquea un receptor del endometrio, la capa que recubre el útero y que se llena de sangre para albergar un potencial embrión. Cuando no hay fecundación el organismo evacua esa sangre durante la menstruación.

Con la acción de este sistema el endometrio se adelgaza, lo cual significa que su capacidad de reserva de sangre es menor. Así, muchas mujeres gradualmente dejan de tener flujos menstruales abundantes y en cuestión de un año el período puede volverse un asunto casi silencioso, con un sangrado de apenas media hora. "El hecho de que la mujer no sangre no tiene ningún efecto nocivo en el organismo", explica María Eugenia Mejía, médica asesora de Schering. Por el contrario, los estudios clínicos realizados durante más de 12 años muestran que este sistema puede ayudar a aliviar los síntomas de condiciones como la endometriosis, hemorragias abundantes y la anemia asociada a estos casos. También se ha visto que disminuye la aparición de los miomas, unos tumores que crecen en la matriz, provocan fuertes dolores y, en algunos casos, la pérdida de este órgano.

El dispositivo es efectivo durante siete años y está recomendado para todas las mujeres en edad reproductiva, pero en especial aquellas que ya han tenido un hijo y quieren planificar a largo plazo. Pero su acción es reversible, lo cual quiere decir que a los 30 días de removido el endometrio regresa a su estado normal y la mujer vuelve a recuperar su capacidad para concebir.

Tal vez el único lunar del método es que es mucho más costoso que el dispositivo de cobre. En Colombia el precio es de 400.000 pesos mientras que el otro se puede conseguir por 30.000 pesos. No obstante el precio puede resultar irrelevante en casos de mujeres que tienen patologías del endometrio y este producto puede ser un método anticonceptivo y una ayuda terapéutica.