infección inguinal
La vejiga hiperactiva puede afectar los ciclos de sueño. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Vida moderna

Vejiga hiperactiva: ¿qué la produce y cuáles son sus síntomas?

Es importante prestar atención a los síntomas para recibir un tratamiento oportuno.

29 de agosto de 2022

La vejiga hiperactiva es una afección de salud que causa necesidad repentina y muy frecuente de orinar, sin que pueda ser controlado fácilmente. Las personas que padecen de esto sienten necesidad de orinar muchas veces en la mañana y en la noche.

En algunos casos puede presentarse incontinencia, es decir, escape de algunas gotas de orina. Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, menciona algunos de los síntomas que pueden indicar que se tiene vejiga hiperactiva:

  • “Sentir una necesidad urgente y repentina de orinar que es difícil de controlar.
  • Experimentar una pérdida involuntaria de orina inmediatamente después de una necesidad urgente de orinar (incontinencia de urgencia).
  • Orinar con frecuencia, en general, ocho o más veces en un periodo de 24 horas.
  • Despertar más de dos veces en la noche para orinar (nicturia)″.

En caso de presentar estos síntomas es importante consultar a un médico para recibir un diagnóstico profesional e iniciar un tratamiento oportuno. “El doctor puede recetar un remedio que relaje los músculos y los nervios. Estos medicamentos pueden ser pastillas, líquidos o parches. Algunos efectos secundarios de estas medicinas pueden ser ojos y boca secos y estreñimiento”, explica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

La vejiga hiperactiva ocurre porque los músculos de la vejiga se contraen solos, incluso cuando hay poca orina en la vejiga. Estas contracciones involuntarias son las que causan la necesidad repentina y urgente de orinar.

De acuerdo con Mayo Clinic esta afección de salud puede causarse por diferentes factores como:

  • Diabetes.
  • Infección de las vías urinarias.
  • Trastornos neurológicos.
  • Cambios hormonales a causa de la menopausia.

Incontinencia urinaria

La incontinencia urinaria consiste en la pérdida de orina involuntaria, la cual puede suceder al toser o estornudar. Generalmente, es asociada con el envejecimiento, pero cualquier persona puede padecerla.

De acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, existen diferentes tipos de incontinencia urinaria, los cuales varían dependiendo su causa:

  • Incontinencia de esfuerzo: sucede cuando el estrés o la presión ejercida en la vejiga hace perder la vejiga. Esto ocurre frecuentemente al toser, estornudar, reír, etc. Este tipo de incontinencia puede deberse a una vejiga fuera de la posición normal o por debilidad en los músculos del piso pélvico, señala la Biblioteca.
  • Incontinencia de urgencia: ocurre cuando se tiene una necesidad urgente de orinar y se escapa algo de orina antes de llegar al baño. Esta incontinencia urinaria es común en las personas ancianas. Puede ser causada por vejiga hiperactiva, afecciones neurológicas, esclerosis múltiple y lesiones de la médula espinal.
  • Incontinencia por rebosamiento: esto sucede cuando la vejiga no se vacía por completa y queda orina almacenada. Es más común en los hombres y puede deberse a tumores, cálculos renales, diabetes y algunos medicamentos.
  • Incontinencia funcional: este tipo de incontinencia ocurre cuando alguna discapacidad física o mental dificulta llegar oportunamente al baño. Por ejemplo, alguien con demencia o alzheimer puede olvidar o no darse cuenta de ir al baño. También es frecuente en personas que sufren de artritis o tienen una movilidad reducida, pues se demoran al desabrochar su pantalón o sentarse en el inodoro.
  • Incontinencia mixta: esto sucede cuando la persona tiene más de un tipo de incontinencia (funcional, rebosamiento, urgencia, esfuerzo). En la mayoría de los casos, son de esfuerzo y urgencia.
  • Incontinencia transitoria: esta pérdida de orina sucede en una situación específica, la cual se caracteriza por ser temporal. Puede ocurrir debido a una infección o la toma de un nuevo medicamento.