La inteligencia artificial (IA) está siendo, hoy por hoy, una de las apuestas más innovadoras de las empresas a nivel mundial, debido a que a través de esta, no solo están optimizando sus procesos; sino que están perfilando de una mejor manera sus servicios, con el objetivo de brindar una experiencia de calidad al usuario, con base en sus gustos y necesidades.

Todas las actividades económicas están incorporando este aspecto revolucionario de la informática, la cual está siendo estratégica para el análisis de datos; logrando aprovechar de una manera más óptima la información, con la cual, las empresas están tomando decisiones claves encaminadas a la solución de problemas, pero también a estar vigentes en el mercado.

En esta sinergia entre la IA y la gestión de datos ha venido trabajando BBVA desde hace unas décadas, a partir de la creación del Área de Data en el 2017, y que se ha convertido en su “vertical estratégico” para todas sus unidades de negocio. Esto, conllevó al banco europeo a poner en marcha la AI Factory, descrito como el centro global de desarrollo y creación de nuevas capacidades, y con el que la compañía del sector financiero viene priorizando todas sus apuestas como organización.

“En los últimos tres años, hemos multiplicado por siete los proyectos estratégicos basados en datos; y nuestros planes pasan por estar gestionando más de 500 nuevas iniciativas en 2023″, señala Martín Manjón, responsable de global de data en BBVA.

Para cumplir este objetivo, el banco europeo ha robustecido su personal experto en datos. Según informó, ya trabajan más de 2.700 profesionales especializados en esta materia (790 científicos de datos y 1.937 ingenieros de datos).

Además, van a reforzar esa plantilla con la incorporación de unos 200 expertos a lo largo de todo 2022, a los que se unirán, previsiblemente, otros 200 profesionales el próximo año. Alrededor de un 10% del total de estas contrataciones corresponden a España.

Sin embargo, para potenciar este esfuerzo como organización, han centrado sus apuestas en el mercado latinoamericano, por lo que planea abrir una nueva AI Factory en México para impulsar el desarrollo de nuevos productos analíticos, especialmente orientados a cuidar la salud financiera de los clientes y ayudarles en su transición hacia un futuro más sostenible.

“En BBVA hemos logrado un modelo de creación global de producto analítico, que permite compartir las mejores soluciones y desarrollos con el resto de países”, comentó Manjón, quien precisó que los esfuerzos de todos el equipo del Área de Data se va a centrar en el desarrollo de nuevos productos que se irán añadiendo a la ‘app’ de BBVA.

Actualmente, existen 12 funcionalidades de salud financiera, entre las que destacan servicios de clasificación automática de los gastos en distintas categorías o el de visualización de suscripciones digitales, como Netflix o Amazon Prime; o los suministros de gas y electricidad. Estos servicios generan hasta 40 avisos personalizados que, por ejemplo, alertan de un recibo mayor de lo habitual, de descubiertos en la cuenta u ofrecen sugerencias para ahorrar y crear un colchón financiero.

BBVA tiene sus herramientas de salud financiera operativas en España, y se están desplegando poco a poco en México, Turquía, Perú, Argentina y Colombia. Según reveló el banco, cada mes, este tipo de herramientas son consultadas por más de 13 millones de usuarios, un 36% más que en 2021; y registran casi 27 millones de interacciones, un 85% más que el año anterior. “Estos servicios, desarrollados con tecnología propia de BBVA, son un elemento diferenciador que aporta una ventaja competitiva al banco frente al resto de los competidores”, señaló.

Otra de las grandes apuestas de los servicios basados en datos de BBVA se centra en la sostenibilidad; por lo que vienen desarrollado varios servicios que muestran la energía consumida, los gastos asociados a la movilidad de los clientes o la huella de carbono tanto para particulares como empresas. Una de las últimas innovaciones, en este sentido, ha sido la nueva calculadora del coche sostenible, que permite ver los gastos asociados a la compra y mantenimiento de un coche eléctrico frente a uno de gasolina.

Esta herramienta incorporará funcionalidades similares para analizar el ahorro que puede suponer la adopción de soluciones de energía solar o puntos de recarga en un hogar, usando los datos reales de consumo energético de cada usuario.

“La apuesta de BBVA por el uso de los datos y la analítica avanzada que aporte valor a nuestros clientes va a verse reforzada en 2023. Esperamos acelerar la incorporación de nuevas funcionalidades y avanzar en la personalización de nuestra oferta de modo que se adecúe en cada momento a las diferentes necesidades de cada uno de nuestros clientes. Los datos van a tener un impacto cada vez mayor en el negocio de BBVA”, concluyó Manjón.