Sigue la polémica y el debate en Colombia por cuenta de los anuncios hechos este domingo 12 de septiembre por el presidente Gustavo Petro, quien aseguró que sí o sí los precios de la gasolina deberán subir en el corto plazo, puesto que el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC) está golpeando con fuerza las finanzas del país y ya se está convirtiendo en una idea insostenible.

Según el mandatario nacional, “el déficit de estabilización de precios de los combustibles por falta de pago del gobierno anterior es de 10 billones por trimestre. Es decir casi 40 billones anuales. Casi la mitad del déficit del presupuesto nacional” y es una consecuencia de “no subir el precio de la gasolina”.

A lo largo de una seguidilla de mensajes por medio de su cuenta en Twitter, Petro hizo varias propuestas sobre las posibles salidas a la crisis que enfrenta la economía nacional por cuenta del FEPC, pero advirtió que sin importar cuál se escoja, habrá un impacto en el bolsillo de los colombianos y señaló que es prioridad cuidar a las familias más vulnerables.

Ahora bien, la representante a la Cámara por Bogotá, Katherine Miranda, se sumó a este debate e hizo una propuesta que beneficiará principalmente a los motociclistas, a los transportadores de carga y evitará que los más pobres sean quienes sufran los estragos de un inminente aumento de los precios de los combustibles en el país.

En su mensaje, la congresista dijo que, “aprovechando el lapsus de @IreneVelezT, hablemos de lo importante: el déficit de estabilización de precios de los combustibles por falta de pago del gobierno Duque es de casi 40 billones anuales. No podemos seguir subsidiando la gasolina en Colombia”.

Ante este panorama, Miranda pidió priorizar a las personas de escasos recursos, usando herramientas como el Seguro Obligatorio contra accidentes de tránsito para crear un subsidio que ayude a evitar que la subida de los combustibles dispare aún más la ya elevada inflación en todo el país.

“Propuesta: el subsidio a la gasolina puede ser focalizado a través del SOAT solamente para motos, transporte de carga y transporte público. Así no afectamos a la clase baja ni al precio de los alimentos”, dijo la representante Katherine Miranda.

Para entender todo este debate es necesario tener en cuenta que en el año 2008, mediante el artículo 69 de la Ley 1151 de 2007, se creó el Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles, FEPC, con el propósito de atenuar en el mercado interno, el impacto de las fluctuaciones de los precios de los combustibles en los mercados internacionales, mediante la entrega de un subsidio que ayuda a que este ítem no suba con tanta fuerza.

De esta forma, se evita que el precio de la gasolina y el ACPM incidan con fuerza en la variación del aumento de la inflación, ya que su valor se tiene presente para elementos básicos como el transporte de carga, la cadena logística de suministro y hasta en el área de producción. Todo impacto o aumento de costos en estas tres áreas se traduce en un crecimiento de los precios finales al consumidor.

De acuerdo con la información de matrículas suministrada por el Registro Único Nacional de Tránsito (Runt), en agosto de 2022 se matricularon 76.123 motocicletas nuevas en el país, una cifra que representa un incremento del 8,8 % frente al mismo mes de 2021.

Con estas ventas, en lo que va del 2022 se registran 561.647 motocicletas nuevas en Colombia, esto es un 41,5 % más que en el 2019, antes de la llegada de la pandemia de la covid-19. Frente a las ventas del mismo periodo de 2020 el crecimiento es del 89,1 %, mientras que respecto al 2021 el alza es del 22,6 %.

De acuerdo con el Runt, el 60 % del parque automotor en Colombia es de motocicletas, pero también es cierto que los propietarios de motos son los mayores evasores del Soat en el país (79 %), además de ser protagonistas en el incumplimiento a la revisión técnico-mecánica, pues el 78 % no tiene este certificado vigente.