El jueves 8 de mayo, los cardenales eligieron al estadounidense Robert Prevost como el nuevo sucesor de san Pedro. Entre las primeras decisiones que tiene que tomar en su nuevo cargo el ahora papa León XIV, está definir dónde vivirá durante su pontificado.

Desde hace siglos, los pontífices se han hospedado en un lujoso apartamento en el Palacio Apostólico. Sin embargo, el difunto papa Francisco rompió la tradición y optó por un apartamento más pequeño, en la residencia de Santa Marta, que retrataba su humildad y sencillez. León XIV ahora tiene la posibilidad de elegir si hospedarse en el palacio del Vaticano o mudarse a otra residencia.

La residencia papal en el Palacio Apostólico fue abierta al público en 2016 por el papa Francisco. | Foto: MONDADORI PORTFOLIO/Archivio Grzegorz Galazka/Grzegorz Galazka

Desde 1870, la residencia papal se instaló en el Palacio Apostólico de la Ciudad del Vaticano. Pese a que gran parte de la instalación es cerrada al público, allí se encuentran la Capilla Sixtina, la Sala Clementina, los Apartamentos Borgia y las habitaciones de Rafael, zonas que permiten la visita de turistas y fieles.

Aunque hasta el momento no se tienen muchos detalles sobre el apartamento del papa, se dice que este cuenta con aproximadamente diez habitaciones, divididas en un vestíbulo, oficinas, el estudio, un dormitorio privado para el papa, una enfermería, un comedor en el que pueden recibir a 16 personas, sala, cocina, una pequeña capilla y un jardín en la azotea.

La habitación del papa, famosa porque en 1944, durante la Segunda Guerra Mundial, una mujer, escondida allí por el papa Pío XII, dio a luz. | Foto: MONDADORI PORTFOLIO/Archivio Grzegorz Galazka/Grzegorz Galazka

El palacio, además, es el centro del gobierno de la ciudad católica: alberga oficinas de los funcionarios de la Santa Sede, imponentes capillas, museos y la Biblioteca Vaticana. El impresionante complejo tiene al menos 1.400 habitaciones y cuenta con 55.000 metros cuadrados de superficie.

La capilla del papa Clemente XIII. | Foto: MONDADORI PORTFOLIO/Archivio Grzegorz Galazka/Grzegorz Galazka

La decisión del papa no pasará desapercibida. Su decisión indicará la imagen que quiere implantar desde los primeros días como sumo pontífice. Hasta el momento, algunos fieles y religiosos han comparado su carisma con el de Francisco. Esto, pese a que en su primera aparición ante los fieles como nuevo líder de la Iglesia vistió la estola roja y blanca adornada que su antecesor rechazó en 2013, quien optó por la sencillez de una vestimenta completamente blanca.

Francisco rompió la tradición y defendió su decisión de vivir en la residencia de Santa Marta, al asegurar: “Estoy a la vista de la gente y hago la vida normal: misa pública a la mañana, como en el comedor con todos, etc. Esto me hace bien y evita que quede aislado”.

La oficina del papa en el apartamento apostólico. | Foto: MONDADORI PORTFOLIO/Archivio Grzegorz Galazka/Grzegorz Galazka

“Venir aquí (a Santa Marta), comer en el comedor, donde está toda la gente, tener la misa, esa donde cuatro días a la semana viene gente de afuera, de las parroquias, me da un poquitito de holgura espiritual. Me gusta mucho eso”, comentó el difunto papa en una entrevista a Televisa, años atrás.

Tras su fallecimiento, se llevó a cabo el rito de constatación de la muerte y sellaron el apartamento en el que vivió durante 12 años.