La Oficina de Protección del Ciudadano de Haití y una delegación colombiana se reunieron este miércoles 28 de julio, luego de que el Gobierno colombiano pidiera realizar una misión consular para revisar las condiciones de salud de los exmilitares colombianos detenidos por estar presuntamente implicados en el asesinato del presidente de Haití, Jovenel Moïse.

La delegación colombiana estaba compuesta por el coordinador de Colombianos en el Exterior y el coordinador académico de la Defensoría Pública. El espacio giró en torno a la situación de los colombianos implicados y el rumbo que tomarían las cosas. Cabe resaltar que el presidente fue asesinado en la madrugada del 7 de julio cuando un grupo de individuos asaltaron la vivienda privada en la que residían con su esposa, quien también resultó herida en el ataque, según informó en un comunicado el primer ministro interino, Claude Joseph.

En la reunión, frente a los hechos, la delegación colombiana condenó el asesinato del presidente Moïse, el cual afecta gravemente la estabilidad y la democracia del continente. En la reunión, la delegación también expresó su tristeza y desconcierto por la implicación de los colombianos en el estremecedor acto.

Cabe resaltar que el presidente Iván Duque reveló que habría solicitado a la Cancillería colombiana que se garantizaran los derechos humanos del grupo de exmilitares y, de la misma manera, que se adelantara un juicio justo, además de mencionar su indignación sobre lo sucedido y manifestar su apoyo y colaboración con la investigación de los hechos.

“Se tendrá que hacer toda la investigación, judicialización y análisis por parte de las autoridades de Haití para imponer las penas que correspondan, pero, por supuesto, también hemos hecho un llamado a las autoridades haitianas para que a través de nuestra Cancillería y la Defensoría del Pueblo se garanticen no solamente los derechos humanos, sino que también se garantice para ellos obviamente un juicio justo”, sostuvo Duque.

Por su parte, la Oficina de Protección del Ciudadano de Haití (OPC), tras la reunión llevada a cabo este miércoles, manifestó su conmoción por el asesinato del presidente, quien se encontraba a tan solo un año de culminar su mandato constitucional de 5 años. Además, la Oficina coincidió con los delegados colombianos y condenó también el hecho.

De acuerdo con lo que reveló en su momento la Cancillería colombiana, el equipo brindaría durante tres días asistencia a los colombianos que permanecen privados de la libertad en ese país.

Tras la visita y la reunión sostenida por los delegados, la OPC aseguró que continuará con la exigencia de investigar, arrestar y juzgar a los autores del crimen. Según explicó a la delegación colombiana, se está adelantando una investigación por parte de la Policía y la Justicia, por lo que la OPC no tomará cartas en el asunto distintas a vigilar el desarrollo de la investigación.

La entidad señaló que estará presente como Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) tanto en el ámbito nacional como internacional y hará sus recomendaciones con respecto al manejo del caso.