Las autoridades de Australia han confirmado en las últimas horas que Clare Nowland, una anciana de 95 años, ha muerto una semana después de que un agente de la Policía la neutralizara con una pistola Taser durante un altercado.

La mujer “murió en paz en el hospital justo después de las 7:00 pm esta noche, rodeada de su familia y sus seres queridos”, afirmó en un comunicado la policía de Nueva Gales del Sur.

Controversia causó en Australia el caso de una mujer de 95 años a quien un policía le disparó con un Taser, cuando se encontraba en el interior de un hogar de ancianos en Yallambee Lodge en Cooma, un pequeño pueblo ubicado a 100 kilómetros al sur de Canberra. | Foto: Rebecca J. Kavanagh/Twitter/ @DrRJKavanagh

Las fuerzas de seguridad, que han presentado cargos contra el agente implicado, han explicado que la mujer ha fallecido en el Hospital de Cooma, en el que se encontraba ingresada, según informaciones del diario ‘The Sydney Morning Herald’.

Nowland, se encontraba hospitalizada en estado crítico tras haber recibido un disparo de la pistola eléctrica Taser el 17 de mayo en un incidente que conmocionó a los australianos.

Unas horas antes de su muerte, un oficial de policía de 33 años fue acusado por causar lesiones corporales graves, agresión causante de lesiones corporales y agresión mediante una pistola Táser.

El subcomisionado de la fuerza policial de Nueva Gales del Sur, no identificó al agente que disparó el taser contra la mujer, pero señaló que se trata de un agente con 12 años de experiencia, quien fue separado del servicio y es investigado por Los detectives de homicidios. (Photo by Recep Sakar/Anadolu Agency via Getty Images) | Foto: Getty Images

La mujer, que padecía demencia, portaba un cuchillo en el momento del incidente y se golpeó en la cabeza tras caer al suelo, El incidente se produjo en la residencia para ancianos Yallambee Lodge en Nueva Gales del Sur, cuando personal del lugar llamó a la policía para informar que una mujer estaba armada.

“Es justo decir que ella estaba armada con ese cuchillo. Era un cuchillo para bistec con filo aserrado que ella había obtenido en el área de la cocina del hogar de ancianos un par de horas antes”, indicó el subcomisionado de la fuerza policial de Nueva Gales del Sur, Peter Cotter.

Un oficial sostiene el nuevo Taser 7 durante una demostración | Foto: PA Wire/PA Images

Los policías indicaron que instaron a Nowland a soltar el cuchillo, pero la mujer avanzó hacia ellos “a paso lento” con su andador, momento en el cual un oficial le disparó con la pistola eléctrica Taser, de electrochoques. Tras el impacto, cayó al suelo y se golpeó la cabeza. “La lesión que sufrió como resultado de golpearse la cabeza contra el suelo, la dejó postrada en cama en este momento. Ella pierde y recupera la conciencia”, añadieron.

Otras muertes por el uso de la pistola Taser

Keenan Anderson, primo del fundador del movimiento ‘Black Lives Matter’, Patrisse Cullors, murió de un paro cardíaco tras ser retenido y disparado con un arma Taser por la Policía de Los Ángeles, durante un accidente de tráfico el pasado 3 de enero.

Anderson, de 31 años, falleció en un hospital cercano después de que varios agentes le dispararon con una pistola eléctrica en el marco de una detención tras un accidente de tráfico. El hombre, según las grabaciones, aparece agitado caminando por una carretera y pidiendo ayuda.

La cofundadora de Black Lives Matter Los Ángeles, Melina Abdullah, se une a la familia de Keenan Anderson, quien murió después de que LAPD lo sometió a una descarga eléctrica y lo restringió | Foto: © Los Angeles Daily News/SCNG

Un agente le exige, tras bajar de la moto, que se ponga frente a la pared mientras Anderson le comunica, con voz agitada, que alguien le ha robado el coche, que ha perdido la llave y que le intentan matar. Tras ello, el hombre intenta huir y es perseguido por el policía, que le ordena que se recueste en el suelo.

En un comunicado, el Departamento de Policía de Los Ángeles alegó que Anderson dio positivo por cocaína y marihuana en un examen toxicológico preliminar, mientras que el jefe de Policía Michel Moore defendió el miércoles que el hombre había cometido un delito grave de atropello y fuga, tratando de “subirse al automóvil de otra persona sin su permiso”.

Con información de AFP y Europa Press*