El periódico británico The Guardian reveló una investigación en la que se evidencia cómo la compañía Uber habría acudido a cuestionadas estrategias para que sus servicios fueran legalizados en varios países, impulsando su expansión durante la última década.

La investigación fue realizada entre docenas de medios de comunicación y da cuenta de cómo representantes de la compañía sacaron provecho de la reacción -a veces violenta del gremio de los taxis contra sus conductores- para obtener respaldo y evadir a las autoridades regulatorias, conforme buscaba conquistar nuevos mercados.

En total, se trata de 124.000 documentos correspondientes a los periodos entre 2013 y 2017, inicialmente obtenidos por el diario británico The Guardian y que luego compartió con el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ). En la investigación también participó The Washington Post.

1. Los ‘kill switch’ para ocultar información

Según lo revelado por la investigación, altos ejecutivos de Uber habrían ordenado el uso de un ‘kill switch’, una especie de interruptor especial para evitar que la policía y reguladores accedieran a datos confidenciales en sus oficinas.

Esta práctica habría sido ejecutada en, por lo menos, seis países: Francia, Países Bajos, Bélgica, India, Hungría y Rumania. Aparentemente, las instrucciones para impedir que las autoridades accedieran a sus sistemas de tecnología de la información (TI) “fueron parte de una sofisticada operación global de la compañía de Silicon Valley para frustrar la aplicación de la ley”.

Uber habría desarrollado sus sistemas de ‘kill switch’ cuando se exponían a numerosas redadas por parte de la policía y otros funcionarios que buscaban reunir pruebas que podrían usarse en contra del modelo que maneja la compañía. Precisamente, esta dinámica ocurrió ante las reiteradas protestas desde los gremios de taxistas, quienes aún exigen el cierre del servicio de transporte sin licencia con el que Uber opera.

Por ejemplo, The Guardian reseñó lo ocurrido durante una redada en París, Francia, cuando los ejecutivos de Uber “fingieron parecer confundidos” mientras las autoridades exigían visualizar los datos. A partir de estos casos, expertos legales plantearon preguntas sobre posibles violaciones de las leyes contra la obstrucción de la justicia en los países donde se habría acudido a ‘kill switch’.

2. ¿Evadió investigaciones regulatorias?

El debate sobre el ‘kill switch’ para, de manera remota, eliminar el acceso a sistemas internos de Uber en dispositivos durante las inspección de las autoridades enciende las alarmas sobre las implicaciones legales que tendría para la compañía.

Al respecto, la portavoz del cofundador y antiguo presidente de Uber, Travis Kalanick, Devon Spurgeon, aseguró que el ejecutivo “nunca autorizó ninguna acción o programa que obstruyera la justicia en ningún país”. En ese sentido, agregó que Kalanick “nunca ha sido acusado en ninguna jurisdicción por obstrucción a la justicia u otro delito relacionado”.

3. El “acuerdo” con Emmanuel Macron

Fueron cinco años en los que su cofundador, Travis Kalanick, forzó el servicio de su plataforma, incluso violando las leyes que regían a los taxis en las ciudades. Por lo que para lograr su objetivo, se reunían con primeros ministros, alcaldes, y ministros de hacienda o economía, como sucedió con el actual -y reelegido- presidente de Francia, Emmanuel Macron.

“La filtración también contiene textos entre Kalanick y Emmanuel Macron, quien ayudó en secreto a la empresa en Francia cuando era ministro de Economía, permitiendo que Uber tuviera acceso frecuente y directo a él y su personal”, sugirió la investigación.

En ese sentido, se especula que Macron parece haber hecho todo lo posible para ayudar a Uber. Incluso, le habría dicho a la compañía que había negociado un “acuerdo” secreto con sus oponentes en el gabinete francés.

El diario francés Le Monde, por su parte, se interesó en las relaciones entre la empresa estadounidense y Macron, cuando era ministro de Economía entre 2014 y 2016. De hecho, fueron ellos quienes concluyeron que existía un “acuerdo” secreto entre ambos, con reuniones en el despacho del ministro y numerosos intercambios (reuniones, llamadas o SMS) entre los equipos de Uber France y Emmanuel Macron o sus asesores.

4. “La violencia garantiza el éxito”: la polémica frase sobre las huelgas de taxista en Francia

Uno de los apartados de la publicación de The Guardian menciona la ‘jugada’ de Uber en Francia, país donde ha sido bastante polémica la presencia de esta plataforma, que pone en aprietos a los taxistas tradicionales de los diferentes países.

Según conversaciones que salieron a la luz pública en la investigación, Travis Kalanick, programador y empresario estadounidense, además de cofundador de Uber, dijo a sus empleados en pleno debate de movilidad en 2015, que salieran a “contraprotestar” frente a las manifestaciones de los taxistas franceses que se oponían al servicio.

“Creo que vale la pena. La violencia garantiza el éxito”, fueron las palabras que el medio británico atribuyó al empresario. Estas conversaciones se habrían dado a través de WhatsApp y otras plataformas digitales.

Ante la publicación de The Guardian, Uber se pronunció y dijo que habían cometido errores, pero aseguraron que eso había quedado en el pasado desde 2017, cuando Dara Khosrowshahi asumió la dirección ejecutiva de la empresa.

“Le pedimos al público que nos juzgue por lo que hemos hecho en los últimos cinco años y lo que haremos en los próximos años”, le dijo la compañía al diario.

Taxistas protestaron en 2015 en contra de Uber, en París, Francia. | Foto: © 2015 Bloomberg Finance

5. Las movidas oscuras de Uber para llegar a Vladimir Putin, en Rusia

De acuerdo con The Guardian, Uber habría orquestado en secreto un operativo político para vincularse con varios oligarcas rusos y así poder conseguir influencia sobre el Kremlin y posicionar al empresa en este país.

Según los documentos obtenidos por el diario británico, Uber contrató, inicialmente, a Vladimir Senin, un importante cabildero quien es miembro prokremlin del Estado para, presuntamente, mover sus influencias y violar las leyes antisoborno de Estados Unidos.

En su momento, Uber aseguró que sí había contratado a Senin, sin embargo, afirmó que no vieron ninguna violación de la ley y que en ese momento él no tenía ninguna cercanía con el presidente ruso Vladimir Putin.

Pero esto no es todo lo que reveló el documento. En 2016, la compañía buscó rápidamente cerrar tratos con empresas controladas por importantes multimillonarios como Alisher Usmanov, Mikhail Fridman y Petr Aven, así como con Herman Gref, director del principal banco ruso controlado por el Estado, Sberbank.

De esta manera, Uber logró asegurarse como socio en Rusia con alianzas con importantes empresarios que ahora están en apuros por cuenta de las sanciones impuestas por Europa y Estados Unidos tras la invasión rusa a Ucrania, la cual inició el pasado 24 de febrero y ya completa más de cuatro meses.

Vehículo de Uber en las ciudad rusa de Kaliningrado. | Foto: Michal Fludra/NurPhoto

6. Supuesta presión a gobiernos para que “reescribieran las leyes”

En la interpretación de los archivos, los periodistas advierten que Uber cruzó los pasillos oscuros de los gobiernos para hacer encajar su proyecto a las legislaciones de cada nación, cuyas letras, inicialmente, les cerraron las puertas para operar.

Con el fin de traspasar a los personajes que tendrían la capacidad de hacer las transformaciones en las leyes, Uber consideró invertir cerca de 90 millones de dólares en 2016 depositados en el lobby, técnica de relacionamiento público frecuentada por los privados para incidir en las decisiones políticas.

“Su estrategia a menudo implicaba pasar por encima de las cabezas de los alcaldes de las ciudades y las autoridades de transporte, y llegar directamente a la sede del poder (…) los documentos indican que Uber era experto en encontrar rutas no oficiales hacia el poder”, se lee en la primera entrega de la filtración.

La influencia se habría ejercido por medio de amigos e intermediarios que usaron su cercanía para buscar encuentros con los políticos. Ahí cayeron, según la investigación, grandes figuras de Rusia, Italia y Alemania.

7. Convertir la oposición en “ventaja”

Los sistemas tradicionales de transporte, en especial los taxistas, lideraron una férrea oposición a Uber, prácticamente, en todos los países donde comenzó a operar.

Sin embargo, según la investigación, los enfrentamientos de Uber con la oposición fueron aprovechados por la compañía como una ventaja, alimentando la narrativa de que “su tecnología estaba interrumpiendo los sistemas de transporte anticuados e instando a los gobiernos a reformar sus leyes”.

Por ejemplo, el informe cita el caso del lanzamiento de Uber en India. En ese momento, Kalanick instó a los gerentes a centrarse en impulsar el crecimiento, incluso cuando “los incendios comienzan a arder”.

“Sepan que esta es una parte normal del negocio de Uber (...). Abraza el caos. Significa que estás haciendo algo significativo”, comentó. Lo mismo ocurrió en enero de 2016, cuando los intentos de Uber por modificar los mercados locales motivaron protestas en países como Bélgica, España, Italia y Francia-

Kalanick pareció poner en práctica ese espíritu en enero de 2016, cuando los intentos de Uber de cambiar los mercados en Europa provocaron protestas furiosas en Bélgica, España, Italia y Francia de taxistas que temían por sus medios de vida.

8. La ayuda de exasesores de Obama para “vender” Uber al mundo

The Guardian narró que, en noviembre de 2015, David Plouffe, exconsejero superior del presidente de los Estados Unidos, envió un correo electrónico a su compañero de campaña de Barack Obama, Matthew Barzun.

Para ese entonces, según la investigación, Plouffe trabajaba para Uber. Por su parte, Barzun se desempeñaba como embajador de EE. UU. en el Reino Unido. “Espero que usted y su familia estén bien. Estaré en Londres el 9 y 10 de diciembre. ¿Alguna posibilidad de que pueda organizar el evento que amablemente sugirió con personas influyentes uno de esos días? Uber, Trump, Clinton, etc. mucho que discutir... David”, escribió Plouffe en el mensaje.

La respuesta de Barzun no se hizo esperar y aceptó la petición de su colega. Este, según da cuenta la filtración, fue solo un ejemplo de cómo Uber aprovechó la reputación de David Plouffe y su enlace con la red de Barack Obama para promover su agenda en Europa y Medio Oriente

“Durante el viaje, Plouffe hizo las rondas para Uber, yendo a reunirse con la BBC, el candidato a la alcaldía de Londres Zac Goldsmith y ejecutivos de un posible inversor ruso en Mayfair, además de dar una charla en el grupo de expertos Institute for Public Policy Research, según muestran los calendarios en los documentos filtrados”, recogió The Guardian.

9. Ministros en Reino Unido no declararon reuniones secretas con Uber

La filtración reveló que al menos seis ministros conservadores en Reino Unido, entre ellos el entonces canciller, George Osborne, y el futuro secretario de Salud Matt Hancock, no declararon reuniones secretas en las que fueron presionados por Uber.

Emisarios de Uber se habrían reunido con los ministros entre 2014 y 2016, en el contexto de las tensas negociaciones para obtener acceso a un “lucrativo” mercado británico.

La polémica radica en que los informes abren la pregunta sobre si Uber reclutó a Osborne y otro ministros del gabinete conservador para presionar al entonces alcalde de Londres, Boris Johnson, para que diluyera las reformas propuestas de minitaxis en de 2015.

En aquel momento, Johnson manifestó que “había sido inundado por conservadores desenfrenados, espumosos y de libre mercado”, quienes se oponían a un endurecimiento sugerido de las regulaciones sobre vehículos de alquiler privado. “En enero de 2016, se informó que Uber había obtenido una gran victoria cuando Transport for London (TfL) abandonó las propuestas”, anotó The Guardian.

10. ¿Uber hizo algo similar en Colombia?

Por el momento, es incierto si Uber implementó alguna de estas cuestionadas estrategias en otros países diferentes a los mencionados. Sin embargo, The Guardian apenas comenzó a revelar la información, pues tiene un total de 124.000 documentos en su poder.

Teniendo en cuenta que Uber es una compañía global, no se descarta que dichas prácticas también hayan sido adelantadas en otros países.