Candace Taylor de 35 años y residente en Luisiana, fue arrestada el pasado lunes 28 de julio, por agentes de la Oficina Estatal de Investigación, tras descubrir que había recibido beneficios de Medicaid durante años.
La mujer no declaró ingresos de sus múltiples negocios que generaron alrededor de 9.5 millones de dólares, entre 2020 y 2024.
El inicio de la investigación de Taylor
La entidad oficial comenzó a investigar a Taylor, tras recibir una queja del Departamento de Salud de Luisiana, quien afirmaba que declaró ingresos inferiores a los que le correspondían para calificar para los beneficios de Medicaid.
“De 2021 a 2024, la Sra. Taylor continuó transfiriendo decenas de miles de dólares entre sus cuentas personales y comerciales, con entradas personales que superaban constantemente los umbrales de elegibilidad para Medicaid”, afirma directamente la declaración jurada.
Medicaid proporciona seguro médico a adultos y niños de bajos ingresos. El programa está financiado parcialmente y administrado principalmente por los gobiernos estatales.
Así engaño Taylor a Medicaid
El gobierno federal establece parámetros que los estados deben seguir. Sin embargo, cada estado administra su programa de Medicaid de manera diferente.
Según declararon las autoridades, Taylor solicitó Medicaid inicialmente en mayo de 2019 bajo el alias Candace Sailor, declarando un ingreso quincenal de u$1,900 y sin dependientes. En ese momento, la solicitud fue denegada.
Menos de un año después, volvió a solicitarlo con el mismo nombre mal escrito, dijeron los fiscales. Además, las fechas no coincidían con los años en que declaró tener personas a su cargo.
La mujer fue descubierta gracias a una investigación iniciada por la Oficina de la Fiscal General de Luisiana Liz Murrill, después de que los investigadores notaran discrepancias entre su estilo de vida lujoso y los ingresos reportados al programa Medicaid.
Los investigadores finalmente descubrieron que ella era propietaria de seis negocios diferentes que generaron más de 9,5 millones de dólares entre enero de 2020 y diciembre de 2024, según documentos judiciales.
Además de la declaración falsa de impuestos, la fiscalía detectó que había hecho depósitos por más de $480,000 en un solo año y transferencias electrónicas para la compra de un Lamborghini Urus 2022, además de cirugías estéticas, joyas y propiedades.
Taylor también figuraba como propietaria o gerente de al menos cinco empresas, todas con ingresos que no fueron reportados al Departamento de Salud de Luisiana.
Por lo anterior, la fiscal Murrill, encargada del caso, se pronunció asegurando que se encargará de que Taylor pague hasta el último peso que le robó al Estado.
Mientras enfrenta cargos por robo de fondos estatales y declaraciones falsas, las autoridades de Luisiana insisten en que este tipo de crímenes no quedarán impunes.
La fiscal Liz Murrill advirtió que su oficina continuará investigando a quienes, como Taylor, se aprovechan del sistema mientras miles de familias realmente necesitadas esperan ayuda.