La Alcaldía de Bogotá dispuso de un nuevo canal a través del cual los ciudadanos en la capital del país podrán cancelar su deuda de valorización. Se trata de la aplicación Gobierno Abierto de Bogotá (GAB), en la que se podrá pagar mediante PSE con débito a cuenta de ahorros o corriente.

En este aplicativo se podrá también generar el estado de cuenta para trámite notarial (paz y salvo), puede ingresar al asistente virtual Fulvia (resuelva sus inquietudes), consultar el estado de cuenta del predio, validar el paz y salvo y generar copia de la cuenta de cobro, entre otros servicios.

Para acceder al sistema se debe descargar el aplicativo de Gobierno Abierto de Bogotá en el teléfono celular e ingresar a la opción Súper Cade Virtual. Allí se desplegará un menú donde se encontrará la opción “contribución de valorización”. Se debe seguir las instrucciones del aplicativo y descargar el recibo de pago.

De acuerdo con la Secretaría General, a la fecha se han realizado más de 25.000 descargas del aplicativo de Gobierno Abierto de Bogotá y se registran alrededor de 11.000 interacciones con los ciudadanos en el Súper Cade Virtual, lo que refleja la facilidad y seguridad para hacer las transacciones por este medio.

Vale recordar que el pago de valorización se puede hacer en su totalidad, a cuotas, o en abono a la deuda. Para mayor información, los capitalinos pueden visitar la página www.idu.gov.co, y elegir la opción Valorización en el menú Trámites y Servicios.

Retrasos en obras de valorización

En mayo pasado, el Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) reconoció el retraso en varias de las obras que se ejecutan en Bogotá con los recursos del cobro de valorización que fue autorizado por el Concejo de la ciudad en 2018 y anunció cambios en los cronogramas establecidos.

Se trata de obras de las aceras y ciclorrutas del Canal Molinos, las de las calles 92 y 94, las conexiones transversales peatonales de las calles 73, 79B y 85 y el puente peatonal de la calle 112 con carrera 9, las cuales presentaban atraso en su ejecución y se tuvieron que modificar los cronogramas de entrega.

De acuerdo con el IDU, las razones de las demoras van desde solicitudes de la ciudadanía, a pesar del trabajo previo que se hace con los habitantes de las localidades para dar a conocer los proyectos, escuchar las inquietudes, atender las preocupaciones comunes y explicar en detalle las intervenciones, hasta dificultades que enfrentan los contratistas en las diferentes etapas de las obras, por hechos sobrevinientes.

También se presentaron solicitudes de cesión de las empresas que hacen parte de los consorcios por dificultades, principalmente, financieras que enfrentan las empresas durante la ejecución de las obras.

En las aceras y ciclorrutas del Canal Molinos, de acuerdo con el IDU, esta obra presentaba en mayo un atraso de 29 % atribuido a factores sociales, ambientales y de ajustes en el diseño, por solicitud de la comunidad.

Este proyecto, que está sobre el corredor ecológico del Canal Molinos, fue planeado priorizando a los peatones y ciclistas. Sin embargo, la comunidad de vecinos expuso la necesidad de mantener las condiciones actuales de la calzada vehicular de la calle 112 entre carreras 13ª y 18C, que comprende dos carriles bidireccionales, con lo cual fue necesario cambiar los diseños para ajustar el espacio y habilitar la ciclorruta que se había diseñado y socializado con la comunidad.

Ahora, en las aceras y ciclorrutas de las Calles 92 y 94, el atraso era de 60 %. Esta obra tuvo un aumento en cantidades de obra del 30 % en el componente de redes hidrosanitarias, lo cual impactó directamente el plazo inicial y el presupuesto.

Además, el contratista también tuvo atrasos en su programa de trabajo, lo cual le ha significado la apertura de procesos sancionatorios. El contratista se comprometió a inyectar recursos financieros para ampliar los frentes de trabajo en los andenes y dar continuidad al proyecto, una vez obtenga la aprobación de los Planes de Manejo de Tráfico.

No obstante, se presentó una solicitud de prórroga de aproximadamente un año más, con lo cual las obras se postergarán hasta mediados del 2023.

De otra parte, al inicio de las obras fue necesario ajustar los diseños de dos tramos del sector, en las carreras 7ª y 8ª, con calle 88, y en la carrera 7ª A, entre calles 88 y 92, para atender requerimientos de la comunidad, lo cual también afecto el cronograma de trabajo.

En el puente peatonal de la Calle 112 con Carrera 9, el contratista solicitó la cesión del contrato, dadas las dificultades de los socios del consorcio de cumplir con la ejecución de la obra, que a mayo, tenía un atraso de 49 %, razón por la cual se adelanta un proceso sancionatorio de incumplimiento.