“Aida Victoria, por sí misma, instrumentalizó y utilizó a su hermano de 17 años para cometer el delito de fuga de presos ingresando a través de él elementos que fueron necesarios para la fuga de Aida Merlano”. De esta forma, la sala penal del Tribunal Superior de Bogotá dejó en firme la condena en contra de la influencer Aida Victoria Merlano por su activa participación y conocimiento en los hechos que rodearon la fuga de su madre, la excongresista Aida Merlano, el primero de octubre de 2019.

Para el Tribunal, la Fiscalía General logró demostrar que el plan de fuga no se habría podido realizar sin la presencia de Aida Victoria en el consultorio odontológico donde se encontraba Gabriel Cely Barajas, ubicado en el tercer piso del edificio Centro Médico La Sabana, ubicado en la carrera séptima con calle 116, en el norte de Bogotá.

La joven creadora de contenido llevó el maletín con todo lo necesario para la fuga, entre esto la soga, los guantes y la ropa deportiva. Igualmente, intentó desviar la atención de los guardianes del Instituto Penitenciario y Carcelario (Inpec) que custodiaban a la excongresista mientras se realizaba un diseño de sonrisa.

Para llegar a esta conclusión, se citaron los testimonios de los guardias del Inpec que estaban en el lugar, así como los videos de las cámaras de seguridad del tercer piso del centro médico, que dejaron en evidencia los movimientos sospechosos y constantes de la joven para intentar desconcentrar a los agentes del instituto carcelario.

En este sentido, se advierte que tuvo una clara intención de instrumentalizar a su hermano menor con el fin que fuera el encargado de entregar los elementos para la fuga, mientras que la influenciadora coordinaba todo por teléfono y hablando directamente con su hermano que entraba y salía del consultorio.

“Como revelan las cámaras de la zona de ingreso al edificio y las zonas comunes del consultorio, el que llevó la maleta que contenía los elementos idóneos (...) en tanto su hermana mayor tomaba la mejor posición y posaba con normalidad, pero expectante al desarrollo de lo que hacia su madre al interior del consultorio”, precisó el magistrado.

Igualmente, se tuvo en cuenta el hecho de la planeación de la fuga, para lo cual fueron fundamentales tanto sus hijos como agentes de la cárcel El Buen Pastor que se prestaron para llevarla hasta el consultorio odontológico para que continuara con su diseño de sonrisa pese a que no se trataba de una urgencia médica y podría esperar.

“Es menester recordar que la fuga de Aida Merlano Rebolledo no puede ser entendida como un suceso ocasional y circunstancial producto de la ocurrencia (...), sino que todo es indicador que fue previa y ampliamente planificado contando con una amplia cadena de cooperación al interior del Inpec y la cárcel El Buen Pastor”, precisa el fallo.

El magistrado llamó la atención sobre la actitud que tuvo Aida Victoria Merlano una vez se consumó la fuga de su madre, mostrando nula preocupación o angustia por lo ocurrido o por su paradero. Demostrando así que todo hacía parte de su plan.

Por la gravedad de su conducta y el hecho de haber utilizado a su hermano menor de edad para cometer este delito, la sala penal aumentó a 13 años y medio de prisión la condena contra la influencer, quitándole todos los beneficios que se le otorgaron en el fallo de primera instancia, como lo es la detención domiciliaria.

La defensa de Aida Victoria anunció que en los próximos cinco días presentará el recurso de casación ante la sala penal de la Corte Suprema de Justicia, asegurando que el fallo fue injusto y no tuvo en cuenta los argumentos.