El fiscal Mario Burgos le ganó el pulso al presidente Gustavo Petro, que fue obligado a rectificar los señalamientos en contra del funcionario de la Fiscalía, el mismo que llevó a la cárcel a su hijo, Nicolás Petro. El presidente se rectificó y aprovechó para criticar un pilar de la fiscal Luz Adriana Camargo.

Cuando la fiscal tomó posesión del cargo, frente al presidente Gustavo Petro, habló de cinco pilares para sus cuatro años de administración, uno incluía fortalecer los mecanismos de terminación anticipada del proceso, como los principios de oportunidad.

Ese día, el presidente no dijo nada, pero año y medio después, esa estrategia le parece un acto de impunidad que beneficia a victimarios.

“Esa herramienta se ha ido deformando hasta convertirse, en demasiadas ocasiones, en una negociación desigual donde el Estado siempre aparece perdiendo; menos justicia, menos verdad, más desinstalación de infraestructuras delictivas, más impunidad”, señaló el presidente Petro.

Mientras reconocía que no hay evidencia o prueba de que el fiscal Mario Burgos estuviera comprometido en irregularidades en el llamado caso La Perla (narcos y funcionarios de la Fiscalía), el primer mandatario se fue por las ramas hasta colgarse de la que, en su criterio, es la causante de la desconfianza de los ciudadanos en la justicia.

“El problema no es un funcionario, es una práctica que, en nombre de la eficiencia procesal, ha terminado por desconectarse de la política criminal del Estado y por debilitar la confianza ciudadana en la justicia”, reveló el presidente.

Dijo que los principios de oportunidad, que tanto defiende la fiscal Camargo en casos como el de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), son una preocupación para el país porque, dijo textualmente, “los responsables obtienen inmunidad, las víctimas quedan sin verdad y la sociedad sin reparación”.

El presidente se extendió en su “reflexión”, que no incluyó datos o hechos fácticos para confirmar que su apreciación del principio de oportunidad tiene sustento, solo lo dijo, e incluso advirtió que esa herramienta de negociación con la justicia debe revisarse porque “en vez de fortalecer al Estado, lo deja en el lugar más débil de la mesa: el del que concede sin recuperar autoridad moral”, señaló el presidente.