La Secretaría de Seguridad de Cali confirmó este sábado el asesinato de 25 personas en lo que va corrido de diciembre y, en los últimos tres días, van 15 víctimas mortales.

Según las autoridades, detrás de la ola de violencia hay una confrontación por las economías ilegales y los problemas de intolerancia que desempolvan las festividades decembrinas.

En su mayoría, los fallecidos fueron hombres mayores de 18 años y aparecieron con marcas violentas producidas con armas de fuego, elementos cortopunzantes y objetos contundentes.

El 7 y 8 de diciembre han sido las fechas más sangrientas. En menos de 48 horas, perdieron la vida 12 ciudadanos. Entre las víctimas está la menor de 15 años que fue desmembrada al interior de un taller de mecánicos.

¿Qué hay detrás de los hechos?

Las hipótesis de las autoridades es que las muertes violentas en diciembre obedecerían a los actos de intolerancia provocados por el consumo de licor. Aunque las actividades ilícitas ocuparían un renglón importante.

La Alcaldía aseguró que, por esta temporada, aumenta el flujo de dinero y los pactos de negocios criminales que afectan la tranquilidad de los ciudadanos, como el narcotráfico y la minería ilegal.

Cali “es el lugar donde se concentran manifestaciones delictivas muy difíciles de gestionar, dado que son las trasnacionales del delito. También los grupos armados acechan a la ciudad”, dijo Jorge Iván Ospina.

En lo que va corrido del año, 950 personas han sido asesinadas en la capital del Valle del Cauca. Pero vale la pena analizar los datos de los otros períodos: 2022 (914), 2021 (1.155) y 2020 (991).

Cali, bajo fuego. | Foto: El País

¿Un aumento de la criminalidad?

El comandante de la Policía Metropolitana, general Daniel Gualdrón, informó que hay un aumento cercano al dos por ciento en la tasa de homicidios, si se compara con los datos del 2022.

“Hay un leve incremento, pero recordemos que el año pasado se hizo una reducción grande por debajo de los 1.000 homicidios en Santiago de Cali”, afirmó el vocero de la institución.

Lo mismo respondió el alcalde Jorge Iván Ospina, quien indicó que las autoridades pasaron de registrar cinco asesinatos por día a 2.2, lo que daría a entender que la estrategia de seguridad estaría funcionando.

“Aunque la cifra pareciera ser realmente muy dramática, es una cifra que tiene un descenso con respecto al diciembre del año anterior y al histórico. Estamos viviendo los años menos violentos de los últimos 30 años”, comentó el mandatario.

Sin embargo, en el Concejo piensan que la ciudad está sumergida en una crisis de inseguridad sin precedentes que no ha podido ser controlada por la administración de Ospina.

El corporado electo, Juan Felipe Murgueitio Bustamante, respondió que hay una tristeza generalizada en la ciudad por los fenómenos criminales que están amenazando la integridad de sus habitantes.

“Lo que estamos viviendo ahora es el resultado de la desatención y la falta de contundencia de la administración local que ha permitido que el crimen se fortalezca en los últimos cuatro años”, dijo Bustamante.

Al parecer, él identificó un déficit de 30 mil millones de pesos en el presupuesto con relación al 2022 y eso se evidenciaría con una supuesta carencia en la infraestructura tecnológica para las labores de investigación.

Temor por inseguridad en Cali. | Foto: DrGrounds