Especiales Semana

MODA

1 de julio de 1985

¿EXISTE UNA MODA COLOMBIANA?
Muchos colombianos y colombianas se sentirán en este momento "a la moda". A todos ellos habría que preguntarles: ¿a cuál moda? ¿a la de que País? ¿a la de qué estación? Parece como si la situación geográfica del país, sin estaciones y con varios climas estables durante el año, muy abajo de Estados Unidos y muy a! Oeste de Europa, lo condenaran a vivir aparte de la "última moda" que proviene de París y Nueva York.
El problema es mucho más complejo de lo que parece. Primero tendriamos que remontarnos a lo que es moda y allí entrariamos a una serie de discusiones en las que los principales argumentos son el consumismo, el arrivismo, la sociedad capitalista, la estética y el espiritu pasajero y desechable de los occidentales. Si queremos comenzar por el principio, habría que decir que un dia la moda no existió porque simplemente la ropa tampoco existía.
Después el hombre comenzó a cubrirse, a comer, a fabricarse un techo y mucho después, cuando hubo solucionado sus necesidades de supervivencia y dispuso de tiempo libre, tuvo que haber nacido la moda. Desde sus inicios la moda diferenció hombres de mujeres y pobres de ricos. Si en Colombia existe una moda, ésta deberia diferenciarnos de los demás paises e internamente debería cumplir un papel diferen ciador también entre regiones y clases sociales, puesto que al fin y al cabo la moda es otro lenguaje con el que expresamos ideas sobre nuestra concepción del mundo y sobre la manera en que deseamos ser apreciados por los demás.
Resulta muy difícil para una mujer caleña o barranquillera vestirse en su ciudad con la última colección de invierno de Londres. También resulta incómodo para una muchacha bogotana llevar la moda del verano en una tarde lluviosa. Esta diferencia de climas y el hecho de que en nuestro país no haya estaciones, nos separa definitivamente del curso de la moda internacional. Por una parte limita a los habitantes de cada ciudad a un solo estilo o a una sola estación durante todo el año, y por otra hace que la moda cambie menos rápidamente, ya que un mismo vestido --mientras dure-puede usarse durante años. Esto ha producido un cierto retrazo en la adopción de nuevas tendencias y es como si estuvieramos todavia separados de Europa por un viaje de tres meses en barco. Ante esta situación Colombia ha asumido la moda de una manera casi desordenada: a veces los sastres de tierra caliente adaptan los modelos de inviernos a telas livianas y a veces en tierras frias se lucen las colecciones de playa durante los días calurosos, o lo que es más insólito, combinadas con prendas de otra estación como chaquetas de paño y botas hasta la rodilla.
Como consecuencia de esta situación el colombiano ha adoptado una moda menos atrevida y si se quiere mucho más tradicionalista y simple. Los colores siempre estan de moda, es decir, no vienen por temporadas, y en especial los tonos primarios y sobrios. Las telas tampoco pasan de moda y en suma, comprar ropa es casi una inversión a largo plazo.
DISEÑOS COLOMBIANOS
Una nueva generación de confeccionistas y diseñadores se ha revelado a la monotonia de la moda colombiana. Primero vinieron quienes impusieron los modelos algo más sofisticados pero con telas burdas hechas en telar, lanas sin tratar o cuero. Estos diseñadores se dedicaron casi exclusivamente a las clases altas debido al alto costo de los materiales y a la exclusividad de los diseños.
Sin embargo los problemas a los cuales debieron enfrentarse fueron muchos. No había en Colombia mas que uno o dos sastres de alta costura, así que del diseño al hecho había mucha diferencia y muchas veces los resultados no tenian la calidad deseada; otras, los mismos materiales no respondían y era prácticamente imposible no encontrar desperfectos; y finalmente, la gente seguia comprando su ropa en el exterior o surtiéndose de contrabando, con la idea de que lo hecho afuera siempre era de mejor gusto.
Con el desarrollo de la industria textil, que permitió una mayor variedad de telas y un mejor control de calidad y con la aparición de muchas fábricas de confecciones, que en un principio surgían como industrias familiares olo que hoy se conoce como microempresas, comenzaron a surgir los primeros modelos masivos de moda colombiana.
Después de copiar moldes por muchos años, los confeccionistas empezaron a competir con la ropa importada o de contrabando creando modelos para nuestras telas y para cada clima y técnificando la producción para ofrecer precios cada vez más competitivos.
Con esta minirevolución de la moda en Colombia se ha renovado el vestuario de muchos colombianos, en especial entre los jóvenes de clase media. Si describiéramos esa nueva moda podría decirse que es una moda muy relacionada con los materiales naturales, cómoda, casual, algo clásica, pero no muy sofisticada.
Los cortes extravagantes y los modelos "lunáticos" están reservados para los jóvenes, mientras que los adultos visten con más elegancia que en los setenta, dentro de una linea muy sobria y tradicional .
¿COMO ESTAR A LA MODA?
Si usted es colombiano y quiere estar a la moda debe realizar una escogencia: se viste como colombiano o se viste como extranjero. Si prefiere la primera opción, puede estar tranquilo, porque en nuestro país ya se produce ropa fina, elegante y de calidad, tanto a precios cómodos, como en diseños exclusivos. Lo más importante en este caso es que siga el dictamen de su propia personalidad, sin importarle mucho la mojigateria y el tradicionalismo de los demás.
Pero si prefiere vestirse bajo la segunda opción, con la moda de Paris, Roma, Londres o Nueva York, debe tener en cuenta varias cosas: En primer lugar, procure estar en esas ciudades la mayoría del tiempo, porque su elegancia aqui no será apreciada ni comprendida; además debe tener presente que en las actuales condiciones económicas del país es cada dia más dificil gastar dólares en el exterior y resulta más costoso el contrabando; y finalmente, tiene que resignarse a vestir solamente con la moda de la estación que corresponde al clima de su ciudad.
En fin, la moda no es otra cosa que la respuesta a la necesidad que tiene todo ser humano de diferenciarse y sentirse admirado.
Pero un, consejo sí podemos darle: siéntese cómodo siempre. -