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El certificado sanitario será obligatorio para ingresar a sitios como restaurantes y bares en Italia. | Foto: Getty Images

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Italia cierra el entretenimiento a los no vacunados: no podrán entrar a lugares de ocio

Los países europeos son el epicentro actual de la pandemia, registrando un repunte en los casos de covid-19 durante la cuarta ola.

24 de noviembre de 2021

La pandemia de la covid-19 ha tenido un aumento exponencial de casos en los países europeos durante las últimas semanas. Austria, por ejemplo, anunció su regreso al confinamiento para prevenir un contagio desbordado durante la temporada navideña.

Otro país europeo que ha registrado un aumento notable en los casos de covid-19 es Italia, con un promedio de 9.000 infecciones diarias, según datos de Our World in Data. Por esta razón, el Gobierno anunció la implementación de una estrategia para contrarrestar la expansión del coronavirus.

Según detalló el Gobierno italiano, a partir del próximo 6 de diciembre se permitirá el ingreso a lugares de ocio y entretenimiento como estadios, restaurantes, museos, teatros, cines o discotecas únicamente a las personas que cuenten con el certificado de vacunación contra la covid-19.

Para ingresar a este tipo de establecimientos se exigirá el “pase covid reforzado” o “supercertificado sanitario”, un documento que se entregará a las personas que hayan completado su esquema de vacunación o hayan superado el virus en el pasado.

Hasta el momento, para el ingreso a actividades o eventos de entretenimiento y deportivos, Italia venía exigiendo un certificado sanitario que se obtenía luego de recibir las dosis de la vacuna o realizarse una prueba covid en un lapso no mayor a 48 horas. Con la nueva normativa, los no vacunados ya no podrán ingresar a lugares de ocio.

Si bien las pruebas de covid negativas ya no serán válidas para ingresar a establecimientos de ocio o eventos masivos en Italia, sí serán aceptadas para quienes se las exigen en su lugar de trabajo.

Con la exigencia del “supercertificado sanitario”, el Gobierno italiano busca incentivar la vacunación en la población que todavía no recibe el biológico. La cifra de personas que no han recibido la vacuna contra la covid-19 en Italia ronda los 7,5 millones, principalmente entre las edades de 40 y 60 años.

Según los datos del martes 23 de noviembre, Italia registró 10.047 nuevos casos de covid-19, y una cifra de 83 muertos. El país europeo acumula cerca de cinco millones de casos desde que comenzó la pandemia y suma más de 130.000 fallecidos.

Una medida para proteger a Italia

El primer ministro italiano, Mario Draghi, explicó durante una rueda de prensa que con esta medida se busca “conservar lo que los italianos han conquistado”, refiriéndose a la recuperación económica y el regreso a una aparente normalidad.

“La situación está bajo control. Estamos probablemente en una de las mejores situaciones de Europa gracias a la campaña de vacunación, que ha tenido un éxito notable. Sin embargo, vemos una situación fuera de Italia que es muy grave”, indicó Draghi.

Según detalló el primer ministro italiano, las nuevas restricciones configuran una medida de prevención para evitar posibles riesgos en el futuro, producto de un ascenso descontrolado de casos de covid-19 entre los no vacunados.

Otra de las medidas que considera Italia es disminuir la duración del certificado sanitario. Actualmente, este documento tiene un vigencia de doce meses, duración que podría reducirse a nueve meses para motivar la aplicación de la dosis de refuerzo.

Asimismo, se podría decretar la obligación de la tercera dosis para los profesionales sanitarios y el personal de las residencias de expertos, así como en las fuerzas del orden y empleados de la administración pública o profesores.

Italia fue uno de los primeros países en exigir el certificado sanitario o “pase covid” para asistir a actividades sociales, lugares de ocio y grandes eventos, mientras que su exigencia para el trabajo se hizo obligatoria desde el 15 de octubre. De acuerdo con las autoridades italianas, este tipo de medidas han contribuido a que su situación permanezca bajo control.