Los casos más sonados de violación de menores en Colombia

Los actos de violencia contra niños han sido en repetidas ocasiones la razón para que todo el país se vista de luto. A continuación, SEMANA presenta algunos de los casos que más han horrorizado al país en las dos últimas décadas.

Rafael Uribe Noguera

Rafael Uribe Noguera fue condenado a 58 años de prisión por el homicidio y abuso sexual de Yuliana Samboní, en hechos ocurridos en diciembre de 2016.

El hecho que horrorizó al país ocurrió el 4 de diciembre de ese año, cuando el arquitecto Uribe Noguera raptó a la menor en el barrio Bosque Calderón Tejada de Bogotá, la sometió a todos clase de vejámenes y luego la asesinó en su apartamento en Chapinero.

Al resolver un recurso de apelación a favor la Fiscalía, el Tribunal Superior de Bogotá aumentó la pena inicial de 51 años y 10 meses de prisión proferida en contra de Uribe Noguera y determinó una sentencia de 58 años de cárcel.

Adicionalmente, se le decretó una multa de 1.223 salarios mínimos legales mensuales vigentes. La decisión de aumentar la pena fue proferida por el Tribunal al acoger los argumentos de la Fiscalía con respecto a que en la primera instancia no se tuvieron en cuenta los agravantes.

A finales del año pasado, un juez absolvió a Francisco y Catalina, hermanos de Uribe Noguera, quienes eran acusados de obstruir la justicia en el caso. La justicia concluyó que si los hermanos de Uribe Noguera hubieran querido hacerlo, tenían los medios económicos y el tiempo para ayudar a su familiar a salir del país o a esconderse de las autoridades.

Semanas atrás, la representante del Partido Conservador Adriana Matiz afirmó que Uribe Noguera recibió una reducción en la pena que le había sido impuesta, por estudio y trabajo. Esta noticia despertó la indignación de los ciudadanos que comenzaron a mover su sentimiento en redes sociales.

En diálogo con SEMANA Noticias, la congresista explicó que, pese a no desconocer los derechos de la normatividad vigente alrededor de las personas privadas de su libertad, es importante poner un límite a los mismos, habida cuenta de la gravedad de esta conducta punitiva, así como la prevalencia de los derechos de los menores en un Estado Social de Derecho.

“No es que estemos diciendo que no tenía derecho a esa redención. Tiene derecho porque, lo reitero, la redención no es un beneficio, sino un derecho, pero es un argumento para decir que este señor va a tener rebaja de pena y puede que salga en un tiempo menor. Necesitamos tiempo límite que sea de 25 años mínimo, pero que pague esos años y garanticemos una verdadera resocialización”, fueron las palabras de Matiz.

Luis Alfredo Garavito

En 1999, Luis Alfredo Garavito fue capturado por el CTI de la Fiscalía. Fue declarado culpable de homicidio en por lo menos 172 crímenes cometidos contra menores entre los años 1992 y 1998, por los que fue condenado a 40 años de prisión.

Su captura se produjo cuando intentó abusar de un niño en zona rural de Villavicencio. Ese día, un indigente que pasaba por el lugar oyó los gritos y fue a ver lo que ocurría. Tras un breve enfrentamiento, Garavito salió corriendo. Horas más tarde la Policía lo capturó cuando salió de los matorrales y caminaba al lado de la carretera.

En marzo pasado se conoció que el asesino serial, de 63 años, padece leucemia crónica, presenta edemas en su cuerpo y, al parecer, también tendría cáncer en el ojo izquierdo, por lo que constantemente viene presentando afectaciones en su estado de salud. De hecho, ese mes, Garavito también debió ser trasladado hasta el área de urgencias del hospital Rosario Pumarejo de López, en Valledupar.

Desde 1999 Garavito cumple su condena en La Tramacúa, en donde también han sido enviados reconocidos delincuentes como el fallecido John Jairo Velásquez, alias Popeye y Rafael Uribe Noguera.

Juan Carlos Sánchez

Juan Carlos Sánchez, uno de los peores abusadores de menores en la historia, fue condenado a principios de 2019 a 60 años de cárcel por un juez de Barranquilla, que lo encontró culpable de acceso carnal abusivo, acceso carnal violento, pornografía infantil y acto sexual, todos estos cargos cometidos en contra de niños menores de 14 años.

Los investigadores consideraron que el ‘Lobo Feroz‘, como se le conoce, es responsable del abuso de al menos 276 menores de edad, pero la cifra podría ser mayor. El hombre no solo violaba a sus víctimas, sino que los fotografiaba y grababa para vender ese material pornográfico fuera del país.

El Lobo Feroz frecuentaba salas de juegos de centros comerciales de Barranquilla, abordaba a menores y les ofrecía dinero para llevarlos a sitios donde realizaba los actos sexuales y les mostraba pornografía infantil. Sus víctimas tenían entre 8 y 14 años. Sánchez aparentaba una vida normal como tecnólogo de sistemas, pero las autoridades llegaron a él luego de que se reportaron más de 50 violaciones a menores de edad en la capital del Atlántico y municipios aledaños.

Manuel Bermúdez

A finales de los años noventa, Manuel Octavio Bermúdez, el Monstruo de los Cañaduzales, confesó haberse hecho pasar por un vendedor de paletas para así atraer y matar a 34 niños en el Valle del Cauca.

De acuerdo con información del diario ‘El País‘, Bermúdez seleccionaba a sus víctimas —niños entre 6 y 12 años, de origen humilde y, por ende, trabajadores de la calle— y les ofrecía un mejor trabajo. Tras entablar conversación y confianza, los iba conduciendo hacia parajes inhóspitos, entre latifundios de caña y hacia las afueras de los cascos urbanos, donde los abusaba y posteriormente asesinaba.