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En medio de las fiestas de diciembre pasado, Roberto Jimenez abrió directorio y empezó a repartir regalos.

DOSQUEBRADAS

El hermano de Macaco

Pese a ser familiar de uno de los más temidos narcoparamilitares, todo apunta a que Roberto Jiménez podría ser el alcalde de la segunda ciudad más importante de Risaralda.

6 de agosto de 2011

Si el favoritismo sigue creciendo como muestran las encuestas, que ya lo ubican de segundo, Roberto Jiménez Naranjo, el hermano de Carlos Mario Jiménez, alias Macaco, uno de los paramilitares más temidos de Colombia, podría convertirse en el alcalde de Dosquebradas, un municipio considerado el motor industrial de Risaralda.

Y aunque Roberto no tiene cuentas pendientes con la justicia, el hecho de ser familiar de Macaco, estar incluido en la Lista Clinton y el ruido alrededor de la financiación de su campaña, son suficientes para encender las alertas sobre los retos que enfrentará el país en las elecciones de octubre próximo.

Por eso, desde diciembre del año pasado, cuando el candidato hizo oficial su deseo de llegar a la Alcaldía, muchos vieron con desconfianza que abriera directorio en plenas fiestas y empezara a repartía regalos. A los niños les entrega juguetes y a los grandes les rifa bicicletas, motos y carros. "La gente sabe que obtenemos los recursos para eso con nuestro equipo de trabajo en la fundación Acción Cívica", explicó el candidato a SEMANA.

También ha llamado la atención la cantidad de taxis, carros, y en particular una costosa Hummer amarilla en la que él se transportaba, que portan desde ese diciembre una R grande, que es el logo de su campaña.

Roberto tiene 47 años, estudió a distancia en el Sena, y es carnicero y administrador de fincas ganaderas. En 2001 se hizo elegir concejal de Dosquebradas; repitió en 2004 y renunció cuando era presidente de esa corporación. "Me pareció que no era prudente estar al frente del Concejo mientras mi hermano se sometía a la justicia", explicó. En febrero de 2008, el hoy candidato Roberto fue incluido en la Lista Clinton como miembro de la estructura mafiosa de Macaco.

Ahora, para poderse lanzar a la Alcaldía, tuvo que superar varios obstáculos. Primero, como ningún partido le quería dar el aval, decidió recoger firmas para inscribirse como independiente. Sin embargo, ninguna compañía aseguradora le quiso vender la póliza que exige la ley. Por eso tuvo que volver a su plan A y empezó a buscar hasta que el partido Afrovides, un movimiento afrocolombiano con sede en Tolú (Sucre), le dio la semana pasada el aval. El único congresista que tiene Afrovides es Yahir Acuña, quien ha sido mencionado por el paramilitar Diego Vecino en sus declaraciones a la Fiscalía como ficha de ese grupo armado en el consejo directivo de la Universidad de Sucre.

El nombre de Roberto Jiménez también apareció en un audio publicado por esta revista en 2006, que formaba parte de una investigación de la Fiscalía sobre la infiltración del paramilitarismo en el fútbol profesional colombiano. Por todo lo anterior hay quienes temen que el dinero ilícito de Macaco pueda aceitar la estructura política de su campaña. Pero el candidato lo niega de manera tajante.

Paradójicamente, nada de eso parece haber sido tan escandaloso para su candidatura como el asesinato de una mujer que asistió a la fiesta de cumpleaños del asesor jurídico de la campaña. El crimen se produjo esa noche, el 3 de julio, cuando la joven recibió dos tiros en el pecho, y su cuerpo apareció envuelto en una sábana blanca.

Esta semana las autoridades capturaron a siete personas, entre ellas al supuesto autor intelectual y al sicario que ejecutó el crimen. Entre los sindicados figura Juan Carlos Alzate, asistente a la fiesta y desmovilizado del Bloque Central Bolívar, el grupo paramilitar que comandó Macaco, según informó el coronel Gonzalo Londoño, comandante de la Policía.

Si bien Roberto Jiménez no estuvo en la fiesta, ni fue el organizador de la misma, la simple presencia de su asesor, el haber prestado el sonido y que varios carros con el logo de su campaña fueron vistos en el lugar de los hechos, dieron pie a toda clase de especulaciones y a reafirmar los temores.

El caso del hermano de Macaco no es el único que preocupa. Esta semana se cumple el plazo para la inscripción de candidatos a las elecciones de octubre. Unos primeros datos conocidos por SEMANA sobre una investigación que hizo Nuevo Arco Iris por solicitud del Ministerio del Interior, muestran que en 75 municipios críticos del país hay cerca de 83 candidatos sobre los cuales líderes cívicos tienen reservas o los organismos de inteligencia tienen anotaciones. Pero, cerca del 80 por ciento de ellos carecen de antecedentes judiciales y por eso pueden competir por alcaldías o gobernaciones.