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El alcalde Celemín ha sido duramente criticado por la crisis del agua en la capital casanareña. | Foto: SEMANA

YOPAL

El suntuoso gasto del alcalde de Yopal

Según la Procuraduría, Willman Enrique Celemín malgastó recursos públicos en tratamientos estéticos y paquetes turísticos.

3 de abril de 2014

En Yopal llevan más de mil días sin agua lo que ha causado la indignación de propios y extraños. Y mientras este problema todavía no tiene solución a la vista, otros prefieren gastar los dineros públicos en cosas suntuarias que nada tienen que ver con los problemas reales de la región.

Así, por lo menos, parece ocurrir con el alcalde de la capital casanareña, Willman Enrique Celemín, a quien la Procuraduría le adelanta una investigación disciplinaria por una presunta falta que para el Ministerio Público es “gravísima”.

Este jueves, en audiencia pública, la Procuraduría General de la Nación indicó que el alcalde por el Partido Liberal suscribió contratos para la compra de ocho paquetes de turismo, como estímulo para sus funcionarios, por un valor de 24 millones de pesos. Pero lo que más indignación ha causado es el empleo de 25 millones de pesos del erario en 150 paquetes de relajación estético corporal, también para los servidores públicos a su cargo.

Según la procuradora delegada, estos dineros podrían ser usados en la construcción de por lo menos cinco viviendas en Yopal o permitiría completar los recursos para reparar el acueducto de la ciudad y restablecer, de una vez por todas, el servicio de agua.

Igualmente, el mandatario habría incurrido en falta disciplinaria al haber suscrito y permitido la ejecución de un convenio de cooperación con la Caja de Compensación Familiar del Casanare (Comfacasanare) para brindar atención integral a 640 adultos mayores del municipio de Yopal, pese a que, al parecer, esta entidad no tenía la capacidad, la infraestructura, o la posibilidad real para desarrollar y cumplir las condiciones y obligaciones adquiridas en el convenio.

Esta situación obligó a la caja a subcontratar la totalidad de las actividades, financiadas con recursos de la Alcaldía, a través de seis contratos suscritos en el mes de abril del 2012.

“Es decir, posiblemente se desfiguró la naturaleza jurídica del convenio de cooperación, fungiendo entonces Comfacasanare como un mero intermediario de terceros subcontratistas que no participaron en un proceso selectivo en igualdad de condiciones con otros posibles oferentes, teniendo en cuenta la cuantía de la contratación analizada y la forma como finalmente fueron ejecutadas las actividades propias del convenio”, indica la investigación disciplinaria.

Esta fue calificada provisionalmente como falta gravísima cometida a título de culpa gravísima.

Pero eso no es todo. La segunda falta endilgada en el pliego de cargos a Celemín está relacionada con dos contratos y un otrosí celebrados en el año 2012, cuyos objetos contractuales habrían sido enmarcados dentro del Sistema de Estímulos Colectivos para los servidores públicos de la administración municipal, pese a que aparentemente no cumplían con tal fin.

Se trata de los contratos 1353 del 26 de diciembre del 2012, suscrito para suministrar 157 paquetes de relajación estético-corporal; el 1305 del 2012, para proporcionar ocho paquetes de turismo social y un otrosí a un contrato de prestación de servicios suscrito para la adquisición, montaje y desmontaje del pesebre navideño y figuras luminosas en el parque el Resurgimiento del municipio de Yopal (Casanare).

Agrega el Ministerio Público que, al parecer, “la actividad aquí contratada no desarrolló, ni se enmarcó en ninguno de los programas de bienestar social, o del programa de incentivos, permitidos por las disposiciones del Sistema de Estímulos para los empleados del Estado, Ley 1567 de 1998 y el decreto 1227 de 2005”. Esta falta fue calificada de manera provisional como “grave cometida a título de culpa gravísima”.

Se trata de un proceso verbal, en la caso de este alcalde, que se resolverá en pocas semanas. Y aquí se ve una paradoja, pues el municipio, uno de los que más dinero ha recibido por cuenta de regalías, no tiene para reconstruir el acueducto, pero sí para gastar en la 'relajación' de los funcionarios. ¿Celemín se salvará de esta?