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En los hospitales que atendieron la emergencia todavía hay 9 personas hospitalizadas. | Foto: Archivo Particular

EMERGENCIA

Tres niños resultaron heridos por el carro bomba

Uno de ellos era una niña y tenía sólo tres años de edad, fueron dados de alta junto a otras 56 personas. En los hospitales todavía se encuentran hospitalizados nueve uniformados, dos de ellos con pronóstico reservado.

18 de enero de 2019

Tras la explosión del carro bomba en Bogotá la cifra de heridos y muertos se ha incrementado con el pasar de las horas. Según el último reporte de la Policía Nacional, 21 personas fallecieron tras el atentado a la Escuela de Cadetes de la Policía General Santander y 68 resultaron heridas. En los hospitales y clínicas de Bogotá se activó el plan de contingencia. Once minutos después de la explosión llegaron las primeras ambulancias al lugar.

24 horas después, el director de la Policía, general Óscar Atehortúa, dio un reporte oficial de las víctimas. La mayoría de los heridos se encuentran en sus hogares, fueron dados de alta 59 personas, entre las que se encontraban tres menores de edad, hijos de policías, que sufrieron un trauma acústico y heridas leves provocadas por los vidrios que se rompieron tras la explosión.

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“Todos los menores de edad afectados son hijos de nuestros policías. Ellos recorren la Escuela General Santander porque en este lugar hay viviendas fiscales”, aseguró Atehortúa, quien además reveló que uno de ellos era una niña de tres años.

En los hospitales que atendieron la emergencia todavía hay 9 personas hospitalizadas. Cuatro en el Hospital Central de la Policía, una en el Hospital Militar, dos -los más graves con pronóstico reservado- en El Tunal, uno herido en el Policlínico del Olaya y una persona más en la Clínica Proinfo. De los nueve heridos, dos de ellos se encuentran en cirugía.

Fallecidos 

El director de la Policía reveló algunos nombres de los fallecidos, los que han sido plenamente identificados. Se trata de Erika Chica, una cadete ecuatoriana de 21 años que se encontraba de intercambio en Colombia. Chica fue una de las primeras víctimas en ser identificadas, su muerte fue confirmada por el presidente Lenín Moreno. Además, la indumentaria que portaba –distinta a la de los cadetes colombianos- dio la certeza de que se trataba de ella.

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En los hospitales fallecieron tres cadetes. Se trata del cadete Cristián Camilo Maquilón Martínez, oriundo de Chigorodó, tenía 20 años y pertenecía a la Liga de Atletismo de Antioquia; Steven Prada, quien pertenecía a la liga de fútbol de la escuela y era oriundo de Ibagué, e Iván René Muñoz Parra, quien provenía de Barichara, Santander.

“Enviamos mensaje de condolencia y nuestro sincero abrazo fraterno a sus padres, hermanos, amigos, vecinos y a toda la comunidad de la vereda El Salitre por la pronta partida de este patiamarillo que será recordado como héroe valiente de Colombia”, aseguró la Alcaldía de Barichara.

También falleció el cadete Diego Molina, un joven pereirano de 20 años, hijo del exsecretario de Gobierno Jhon Diego Molina. "A uno le da dolor de patria de cómo acaban con los sueños", aseguró Molina a la FM. La sexta víctima identificada es Allan Paul Bayona, atleta de las Fuerzas Armadas, era semifondista.

Una de las mayores tragedias las viven los familiares que aún esperan la identificación del cuerpo de sus seres queridos. Medicina Legal está tomando 13 pruebas de ADN para entregar los cuerpos. “Al hacer este listado encontramos 20 personas inicialmente desaparecidas que hoy podemos decir que son 20 alumnos fallecidos. 21 cadáveres podían ser encontrados, no así todos los cuerpos, teniendo en cuenta el resultado del impacto que produce una explosión de este talante. De ellos hay cuatro que han sido plenamente identificados”, explicó el director de la Policía.

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Casi todos los padres de los cadetes que fallecieron se han acercado a la Escuela de la Policía, solo resta que uno de los acudientes llegue a Bogotá, se encuentra haciendo un largo viaje para llegar. El país marchará el próximo domingo para despedir a los jóvenes cadetes y para decir “No más terrorismo”.