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El Policía herido fue trasladado a la ciudad de Cúcuta
Se espera que los uniformados sean trasladados a la ciudad de Cúcuta. Imagen de referencia. | Foto: Policía de Norte de Santander

Norte de Santander

Francotiradores hirieron a dos policías en la estación de San Calixto, Norte de Santander

El defensor de los derechos humanos Diego Villamizar rechazó en SEMANA esta acción criminal.

11 de julio de 2022

El cese al fuego no para en la región del Catatumbo. En la tarde de este lunes 11 de julio fue atacada de manera indiscriminada la estación de Policía del municipio de San Calixto, Norte de Santander, que dejó como saldo dos uniformados heridos.

Este ataque con ráfagas de fusil se presentó sobre la 1:00 de la tarde, justamente cuando los policías se encontraban haciendo el relevo del servicio. De acuerdo con las autoridades, este hecho se registró, al parecer, por parte de tres francotiradores.

En medio del fuego cruzado de la Fuerza Pública contra los subversivos que delinquen en esta región, resultaron heridos el subintendente Norbey Isauro Valera Vargas, quien recibió un impacto a la altura del cuello, y el patrullero Wílmer Rodríguez Colmenares, lesionado en la pierna izquierda.

En medio del hostigamiento, una motocicleta que se encontraba estacionada en una zona del municipio recibió varios impactos de arma de fuego y como consecuencia de eso se prendió en llamas, generando pánico entre los pobladores.

Ante esta nueva situación, SEMANA consultó a Diego Villamizar, defensor de los derechos humanos en la región, quien rechazó esta acción que busca intimidar a la Fuerza Pública y alterar el orden público en el departamento.

“Nos preocupa que estos grupos ataquen de manera indiscriminada a la población civil, violando derechos humanos, incluso el derecho internacional humanitario tras el aumento de los ataques contra la Policía y la población civil”, puntualizó el defensor en este medio.

Así mismo, se mostró preocupado con las múltiples acciones terroristas que se han presentado desde inicio de año, donde aseguró que han sido más de 100 los ataques contra los uniformados en esta región del Catatumbo.

“No existen acciones concretas y el terrorismo a diario se toma los municipios del departamento. Hacemos un llamado a la ciudadanía a unirnos a la Fuerza Pública y entre todos dar con el paradero de los autores”, recalcó Villamizar en SEMANA.

Asesinan a subintendente en Ocaña

En la mañana del 9 de julio fue asesinado el subintendente de la Policía Nacional, José Leonardo Jaimes Fernández, en el municipio de Ocaña, Norte de Santander.

De acuerdo con información suministrada por las autoridades, el uniformado, junto con otros compañeros, estaban adelantando actividades de control en establecimientos públicos del municipio.

En ese momento, mientras se encontraban en el sector conocido como La Ciudadela Norte, fueron atacados de manera indiscriminada por tres sujetos, quienes portaban armas fuego.

De manera inmediata se presentó un intercambio de disparos que dejó como resultado un policía herido, el fallecimiento de Leonardo Jaimes, así como la neutralización de uno de los delincuentes. En el hecho, otras dos personas resultaron lesionadas, quienes fueron remitidas al hospital regional Emiro Quintero Cañizares.

Sin embargo, en las últimas horas las autoridades de Norte de Santander enviaron a la cárcel a dos presuntos integrantes del GAO-r E33, implicados por ser los autores materiales del asesinato del subintendente.

Estos sujetos son: José Rafael Carrascal Sánchez, alias Tocayo, y Jhonier Carrascal Pérez, alias Robinson. De acuerdo con las investigaciones de la Policía, estas personas serían las responsables del homicidio del oficial, de 36 años.

Así las cosas, en la finalización de las audiencias concentradas, un juez promiscuo municipal de Puerto Santander impuso medida de aseguramiento en establecimiento carcelario a los dos capturados por los delitos de fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones, receptación y homicidio agravado.

Por su parte, al capturado Carrascal Sánchez se le imputó el delito de receptación en atención a que el arma que portaba figuraba hurtada a la Unidad Nacional de Protección (UNP) en 2018 en el municipio de Convención, Norte de Santander.