Hojas de mango
La cáscara de mango puede ser utilizada como tópico para mejorar el aspecto de la piel y el cabello. | Foto: Getty Images

Vida Moderna

Cáscara de mango: qué beneficios tiene y cómo usarla

Varias de las múltiples vitaminas que contiene esta fruta tropical también están presentes en su cáscara.

4 de abril de 2022

El mango es la fruta nacional de la India, donde se producen 14 millones de toneladas al año. El consumo diario de este alimento tropical trae un sinfín de beneficios al organismo, entre los que se destaca la prevención de enfermedades del corazón, la mejoría en la digestión e, incluso, la prevención del cáncer.

Por ello, el mango fue catalogado como uno de los superalimentos, según el evento de expertos Nutrition 2021 Live Online, pues es una fruta con una alta riqueza de vitaminas. Un solo mango aporta la cantidad diaria necesaria de vitamina A que debe tener el cuerpo.

Este tipo de vitamina, según la nutricionista Marta Gámez, directora técnica del Grupo NC de Salud de España y citada por el diario El Mundo, contribuye a mejorar la apariencia de la piel, el sistema inmunológico, el metabolismo, la regeneración celular y la visión.

Así mismo, la cáscara del mango también posee la dosis recomendada de vitamina C diaria que debe tener el cuerpo, lo que permite que se afloren los efectos antioxidantes que previenen el envejecimiento. Para utilizarla con este propósito el portal GastroLab, explica que se debe:

1. Sacar la cáscara del mago y ponerla a secar.

2. Moler la cáscara y mezclarla con yogur.

3. Aplicar en las áreas afectadas.

4. Retirar con agua.

Además, la cáscara del mango puede beneficiar al cabello protegiéndolo de la resequedad y alejándolo de problemas como la caspa. Para ello hay que secar la cáscara del mango, pulverizarla para mezclarla con yogur, huevo y un poco de puré de la misma fruta; aplicar la mascarilla desde el cuero cabelludo hasta las puntas y enjuagar.

Por otro lado, para los fanáticos de la naturaleza, también es posible utilizar la cáscara de mango como fertilizante y puede ir sola o acompañada de otros desechos orgánicos.

Además de lo mencionado anteriormente, el mango, junto con su cáscara, también ayuda a:

  • Mejorar la digestión: debido a su alto contenido en fibra, el mango ayuda a mantener limpio el colon, lo cual permite al órgano trabajar óptimamente. Por otro lado, los expertos señalan que esta fruta contiene unas enzimas digestivas que descomponen proteínas y mejoran la digestión.
  • Ayudar a perder peso: el mango tiene una carga de calorías mínima, lo que ayuda a saciar el hambre y a controlar el peso. Cien gramos de esta fruta solo aportan 59 kilocalorías, un porcentaje bajo si se tiene en cuenta que la dieta ligera de un adulto sedentario debe tener al menos 2.000 kilocalorías al día.
  • Reducir el cansancio: el mango le aporta al cuerpo 15 % de vitamina B9, es decir, ácido fólico y otro alto porcentaje de vitamina E, necesarios para aminorar la fatiga.

En cuanto a su consumo, los expertos del Centro Nacional de Salud español aseguran que hay diferentes formas de incluir el mango en la dieta.

Al ser un alimento ligero se puede consumir como onces, sea en la mañana o en las tardes, aunque también es recomendado en batidos con leche vegetal y frutos secos, los cuales aportan una buena dosis de energía al cuerpo.

A pesar de ello, antes de añadirlo del todo a la rutina alimentaria, es necesario consultar con un especialista que tenga en cuenta las comorbilidades de cada persona y los pros o contras que podría tener la ingesta diaria de mango o cáscara de mango.