Investigadores señalan que se debe fortalecer las conexiones cerebrales para que este órgano funcione en la tercera edad a pesar del deterioro por los años. Foto: GettyImages.
Los ultraprocesados pueden aumentar el riesgo a tener demencia. | Foto: Foto Gettyimages

Vida Moderna

El alimento que se debe evitar para no tener riesgo de demencia; ¿cuál es?

Los ultraprocesados pueden contribuir al deterioro cognitivo dependiendo de la dieta que se lleve.

14 de diciembre de 2022

La alimentación es uno de los factores más importante para llevar una buena salud y evitar posibles complicaciones que terminen eventualmente en una enfermedad, por lo que, en la actualidad, las personas han empezado a preocuparse más por los alimentos que llevan a sus platos diariamente, puesto que más allá de la parte estética, están los efectos que una mala alimentación puede tener a largo plazo.

En ese sentido, a pesar de lo deliciosos que puedan llegar a resultar para algunas personas, los ultraprocesados no deben convertirse en un alimento muy repetitivo dentro de la dieta que se esté siguiendo, puesto que si más de uno de cada cinco alimentos que se esté consumiendo diariamente es de este tipo, es posible que se aumente significativamente el riesgo de deterioro cognitivo.

Este tipo de productos que son formulaciones industriales listas para consumir, lo que las hace altamente llamativas debido a su bajo precio en varios casos y, en especial, a la facilidad que representan para un estilo de vida que no da tiempo de meterse varias horas a la cocina a preparar un platillo, al parecer, podrían conducir a un mayor riesgo de deterioro cognitivo y demencia sin necesidad de consumir cantidades exorbitantes.

De hecho, numerosos estudios han estudiado y confirmado su relación con enfermedades como la inflamatoria intestinal, el cáncer, la más común que es la obesidad e incluso muerte prematura, como efecto de dicha alimentación, que se encuentra totalmente alejada de un estilo de vida saludable.

Al respecto, un nuevo estudio reveló cifras bastante preocupantes que demuestran dicho impacto en la salud de las personas, luego de estudiar a profundidad a 10.000 brasileños durante 10 años, señalando que a comparación con las personas que disminuyeron la cantidad de ultraprocesados en sus comidas diarias obtuvieron un menor deterior en comparación con quienes lo hacían de forma seguida, dejando una tasa de deterioro cognitivo en 28 % más rápida, junto con función ejecutiva disminuida en un 25 % más acelerado.

“En Brasil, los alimentos ultraprocesados representan del 25 % al 30 % de la ingesta total de calorías. Tenemos McDonald’s, Burger King, y comemos mucho chocolate y pan blanco. Desafortunadamente, no es muy diferente de muchos otros países occidentales”, declaró Claudia Suemoto, profesora de la Facultad de Medicina de la Universidad de São Paulo y coautora del estudio, en una entrevista a CNN.

De esta forma, lo mejor es evitar la mayor parte posible de dichos consumibles en la dieta, si lo que se quiere es prevenir diversos tipos de padecimientos, buscando alternativas de alimentación más saludables que preparadas de la forma correcta son igual de deliciosas que cualquier otro platillo de fácil preparado.

Síntomas de la demencia

Estos son algunos de los principales síntomas que evidencian este síndrome, según el instituto de investigación Mayo Clinic.

  • Pérdida de la memoria, que generalmente quien la evidencia es otra persona.
  • Dificultad para comunicarse o encontrar palabras indicadas al entablar una conversación. Luego, se añaden los problemas para pronunciar palabras, terminando con una incapacidad de hablar.
  • Dificultad con las habilidades visuales y espaciales, como perderse mientras se conduce
  • Dificultad para razonar o para resolver problemas
  • Dificultad para manejar tareas complejas
  • Dificultad para planificar y organizar
  • Dificultad con la coordinación y las funciones motoras
  • Confusión y desorientación. La desorientación es algo esporádico en las primeras fases, llegando a agravarse poco a poco.
  • Las tareas cotidianas que al principio de la enfermedad no representan un problema, son cada vez más complicadas de realizar. Las personas con demencia avanzada necesitan ayuda para vestirse, calzarse, comer e ir al baño, entre otras acciones.