Vida Moderna
¿Qué partes del cuerpo desinflama la cúrcuma?
La cúrcuma también puede ser utilizada externamente. Cuando se aplica en forma de cataplasmas, puede contribuir a la disminución de la inflamación y aliviar el dolor.
La cúrcuma, también llamada azafrán indio o especia dorada, es una planta originaria de Asia y Centroamérica. Su distintivo color amarillo brillante ha inspirado a diversas culturas a emplearla como tinte, pero también es un componente esencial en el curry en polvo.
Se puede ingerir en forma de cápsulas, tés, polvos y extractos. La curcumina es el compuesto activo de la cúrcuma y posee propiedades biológicas poderosas. En el sistema de medicina ayurvédica de la India, se recomienda la cúrcuma para tratar diversas condiciones, incluyendo el dolor crónico y la inflamación.
En la medicina occidental, se ha iniciado la investigación sobre la cúrcuma como posible analgésico y agente terapéutico. Aunque la cúrcuma es una especia sabrosa y nutritiva para el consumo, también ha sido utilizada tradicionalmente en la medicina ayurvédica y china para tratar la inflamación, afecciones cutáneas, heridas, problemas digestivos y condiciones hepáticas.
Propiedades antiinflamatorias
La Arthritis Foundation menciona diversos estudios que indican que la cúrcuma posee propiedades antiinflamatorias y que podría ayudar a disminuir la inflamación. Esta capacidad antiinflamatoria podría ser beneficiosa para las personas que padecen artritis y experimentan agravamiento en sus articulaciones.
Tendencias
El portal saluspr.com sugiere que “se consideren cápsulas de cúrcuma en dosis de 400 a 600 miligramos (mg), tomadas hasta tres veces al día, como una opción para aliviar la inflamación”.
¿Cómo consumir cúrcuma para tratar el dolor articular?
¿Qué se necesita?
- 5 g de cúrcuma
- 5 g de raíz fresca de jengibre
- 1 ramita de canela (5 g)
- Un litro de agua
- 1 cucharada de miel (25 g)
¿Cómo se prepara?
- Es muy sencillo. Lo primero que se debe hacer es poner a hervir el litro de agua.
- Luego, cuando llegue a ebullición, añadir el jengibre, la canela y la cúrcuma para que se haga una adecuada cocción durante 30 minutos. De ese modo, sus principios activos se quedarán en el agua.
- Pasado este tiempo, apagar el fuego y dejar que esta infusión repose unos 15 minutos.
- Colar todo el contenido y quedarse con la infusión.
- Endulzar con 25 g de miel y llevar todo el contenido a una botella de cristal oscura. No hace falta dejarla en la nevera. Reservarla en un lugar donde no lleve sol y mantener a temperatura ambiente.
Alivio del dolor
El portal web mejorconsalud.as.com destacó que “la cúrcuma actúa como un analgésico y se ha ganado una reputación por su capacidad para reducir el dolor asociado con la artritis”. La investigación respalda la idea de que la cúrcuma puede aliviar el dolor, incluso se ha encontrado que funciona tan eficazmente como el ibuprofeno en personas que padecen artritis en las rodillas.
Aunque las recomendaciones sobre la dosis pueden variar, en un estudio los participantes tomaron 800 mg de cúrcuma en forma de cápsula diariamente.
Salud del hígado
La cúrcuma ha estado bajo los reflectores en tiempos recientes debido a su notable capacidad antioxidante. Su impacto en este sentido parece ser tan sólido que puede ofrecer protección contra el daño hepático causado por toxinas. Esta información podría ser alentadora para aquellos que consumen medicamentos potentes para tratar la diabetes u otras condiciones médicas, ya que podrían estar expuestos a riesgos de daño hepático a largo plazo.
Reducción del riesgo de cáncer
La curcumina demuestra ser una opción prometedora en la lucha contra el cáncer. Las investigaciones indican que este compuesto tiene propiedades protectoras contra diversos tipos de cáncer, como el de páncreas, próstata y mieloma múltiple.
Digestión
La cúrcuma no solo añade sabor a los platos, como en el curry en polvo, sino que también puede desempeñar un papel importante en la digestión. Además de mejorar el sabor, esta especia puede contribuir a una digestión saludable gracias a sus propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. La medicina ayurvédica ha utilizado la cúrcuma como agente curativo digestivo, y ahora la medicina occidental está investigando su potencial para mejorar la inflamación intestinal y la permeabilidad intestinal, factores que influyen en la eficiencia digestiva.