Vida moderna
¿Se puede prevenir el cáncer? Esto dicen los expertos
Es importante tener hábitos sanos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que para contribuir a la prevención del cáncer es importante trabajar en los factores de riesgo que sí se pueden cambiar, la mayoría relacionados con un estilo de vida saludable.
“En la actualidad se pueden evitar entre el 30% y el 50% de los casos de cáncer reduciendo los factores de riesgo y aplicando estrategias preventivas basadas en la evidencia. Además, esta carga se puede reducir mediante la detección precoz y la atención y el tratamiento adecuados de los pacientes. Si se diagnostican a tiempo y se tratan adecuadamente, las probabilidades de curación de muchos tipos de cáncer son elevadas”.
Algunos de los tipos de cánceres más frecuentes son el cáncer de mama, cuello uterino y el colorrectal. Cuanto más se inicie oportunamente un tratamiento, los resultados de este mismo serán mejores. Por eso, es clave la detección temprana a través de exámenes médicos regulares.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) brinda algunas recomendaciones que pueden contribuir a la disminución de los factores de riesgo:
Tendencias
- No fumar y mantenerse alejado del humo de las personas que lo hagan.
- Moderar el consumo de alcohol.
- Proteger la piel de la sobreexposición a los rayos solares. Evitar el uso de cámaras bronceadoras.
- Comer muchas frutas y verduras.
- Mantener un peso saludable. Para esto es importante tener una dieta balanceada y ejercitarse regularmente.
Sobre esa misma línea, los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, también señalan algunos consejos para tener en cuenta:
- Moderar el consumo de carnes procesadas. Esta entidad destaca un informe de la Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer, el cual concluyó que “comer grandes cantidades de carne procesada puede aumentar ligeramente el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer”.
- Vacunarse contra la hepatitis B y el virus del papiloma humano (VPH). Se debe acudir a un centro de salud y pedir la información sobre este tipo de vacunas.
- Tener relaciones sexuales con condón para disminuir el riesgo de padecer ETS, VIH o Sida. “Las personas que tienen VIH o SIDA tienen un mayor riesgo de contraer cáncer de ano, hígado y pulmón. El VPH se asocia con mayor frecuencia con el cáncer de cuello uterino, pero también podría aumentar el riesgo de contraer cáncer de ano, pene, garganta, vulva y vagina”, detalla Mayo Clinic.
- No compartir agujas con personas que se droguen por intravenosa para evitar el contagio de VIH, hepatitis B o hepatitis C.
Posibles síntomas
El Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos explica algunos de los síntomas que el cáncer puede causar. Cabe resaltar que se debe consultar a un doctor para que sea él quien realice un diagnóstico profesional.
Cambios en los senos
- Sentir un bulto o algo sólido en el seno o bajo el brazo.
- Cambios o descargas en los pezones.
- Piel roja, escamosa, sumida o con hoyos y que da comezón.
Cambios en la vejiga
- Dificultad para orinar.
- Dolor al orinar.
- Sangre en la orina.
Hemorragia o moretones sin una razón aparente
Cambios en el intestino
- Sangre en el excremento.
- Cambios en los hábitos del intestino.
Tos o ronquera que no desaparece
Problemas al comer
- Dolor después de comer (acidez o indigestión que no desaparecen).
- Problemas al deglutir.
- Dolor de estómago.
- Náuseas y vómitos.
- Cambios de apetito.
Cansancio grave y que dura tiempo.
Fiebre o sudores nocturnos sin ninguna razón.
Cambios en la boca
- Un parche blanco o rojo en la lengua o en la boca.
- Hemorragia, dolor o entumecimiento en los labios o en la boca.
Problemas neurológicos
- Dolores de cabeza.
- Convulsiones.
- Cambios en la vista.
- Cambios en la audición.
- Parálisis facial.
Cambios de la piel
- Un bulto de color carne que sangra o que se vuelve escamoso.
- Un nuevo lunar o un cambio en un lunar ya existente.
- Una irritación que no sana.
- Ictericia (volverse amarillos la piel o el blanco de los ojos).
Hinchazón o bultos en cualquier parte como el cuello, las axilas, el estómago y las ingles
Subir o bajar de peso sin una razón conocida.