Colesterol
El té de ajo mejora los niveles de colesterol. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Vida Moderna

Té de ajo para mejorar la circulación sanguínea y bajar los niveles de colesterol: así se prepara

Comer ajo con regularidad mejora la circulación sanguínea, ya que aumenta el diámetro de los vasos sanguíneos.

4 de mayo de 2023

El ajo es un alimento maravilloso que sirve para muchas cosas, además de darle sabor a las comidas, ya que tiene bastantes propiedades. El ajo es beneficioso para la salud.

té de ajo
Té de ajo | Foto: Getty Images

¿Para qué sirve el té de ajo?

Como se mencionó con anterioridad, el ajo tiene diferentes propiedades nutricionales para la salud, en el caso del té de ajo, este actúa como un antibiótico natural que ayuda a combatir infecciones de garganta. De acuerdo con el portal cocinafacil.com.mx, “el ajo es muy bueno para mejorar la circulación de la sangre y evitar coágulos, ayuda a reducir los niveles de colesterol malo en la sangre, cuidar el aparato digestivo, logrando una mejor función intestinal, puede proteger y facilitar la función del hígado y estimular el metabolismo, ayudando a la pérdida de peso”.

¿Cómo preparar la bebida?

Ingredientes

-3 dientes de ajo frescos y pelados en trozos

-El jugo de medio limón

-1 cucharada de jengibre rallado fresco

-2 taza de agua

-Miel al gusto

Preparación

-Calentar el agua en una olla y agregar el ajo con el jengibre en cuanto comience a hervir.

-Deja infusionar por 5 minutos y retirar del fuego.

-Agregar el jugo de limón y la miel para mejorar el sabor de la bebida.

- Debe procurar tomar lo más caliente posible (sin que este queme porque podría lastimar la garganta, tanto por la temperatura como por la intensidad de los ingredientes).

- De preferencia, puede tomarlo por las noches cuando vaya a dormir o por las tardes si no va a salir de casa, pues los ingredientes calientan el cuerpo y exponerse podría ser perjudicial para la salud.

Circulación sanguínea
El té de ajo ayuda a tener una buena circulación sanguínea. | Foto: Getty Images/iStockphoto

Otros beneficios de consumir ajo

Proteger el corazón

El portal de nutrición sabervivirtv.com, destacó que “comer ajo con regularidad mejora la circulación sanguínea, ya que provoca vasodilatación, aumenta el diámetro de los vasos sanguíneos y por tanto, la sangre fluye con más facilidad disminuyendo la presión”.

Abrir el apetito

Otra de las cualidades del ajo es que estimula las mucosas gastrointestinales, provocando un aumento de las secreciones digestivas y de la bilis. Esto se traduce en una mejor preparación del tracto digestivo para la digestión de los alimentos.

Es un eficaz antibiótico

Un estudio de la Universidad Estatal de Washington (EE.UU.) y publicado en la revista Journal of Antimicrobial Chemotherapy, concluyó que “el sulfuro de dialilo, un compuesto del ajo, es 100 veces más eficaz que los antibióticos populares para luchar contra la bacteria Campylobacter (una de las causas más comunes de infecciones intestinales)”.

Puede combatir el resfriado

Un equipo de científicos del St. Joseph Family Medicine Residency en Mishawaka, Indiana (EE.UU.) llegó a la conclusión de que “la ingesta de ajo puede disminuir la frecuencia de los resfriados en adultos”.

La presión arterial alta coloca en riesgo la vida de una persona.
El ajo tiene propiedades que ayudan a nivelar la presión arterial. | Foto: Getty Images

¿Cuándo no se puede comer ajo?

Aunque sus beneficios son muchos, el ajo también tiene algunas contraindicaciones que pueden afectar la salud y que por ello, se han de tener en cuenta:

  • Se desaconseja cuando haya una tendencia a sufrir hemorragias porque debido a su efecto vasodilatador hace que la sangre fluya con mayor rapidez.
  • En casos en los que haya deficiencia de ácidos gástricos puede que no se digiera bien y provoque flatulencia.
  • Puede provocar ardores de boca, esófago y estómago.
  • En cuanto a las posibles interacciones con fármacos, puede elevar el riesgo de sangrado si se administra junto a anticoagulantes como el ácido acetilsalicílico u otros.
  • Tampoco es recomendable si se sigue un tratamiento con hipoglucemiantes, dado que el ajo acentuaría la hipoglucemia.
  • Durante el embarazo y la lactancia se aconseja evitar el consumo de grandes cantidades de ajo, ya que puede estimular el útero o provocar incluso un aborto.